Gracias a una denuncia anónima, la Policía de Investigaciones de San Fernando, dio con el paradero de un matadero clandestino que operaba en el sector de la localidad de Polonia.
Una vez informado al Fiscal de turno, los detectives pudieron llegar al lugar y comprobar que se faenaban aves. En el domicilio se encontraron varios instrumentos –como sierras y cortadoras de huesos- que eran utilizados para procesar a diversos animales.
En el lugar a demás habían maquinas de frió que mantenían en su interior carnes, que eran embazadas en bolsas de la empresa Súper Pollo.
Debido al hecho, se presentó en el “matadero clandestino” personal del departamento de Salud del Ambiente, los cuales pudieron verificar que parte de la carne se encontraba en mal estado y comprobaron que las viseras de los animales eran tiradas a un canal de regadío. Además los sujetos operaban en el interior de una casa de madera, la cual estaba llena de ratones y moscas.
La PDI logró incautar cerca de 170 kilos de carne de vacuno, cerdo chancho y las bolsas de pollo en envases de la empresa antes mencionada, por lo que los funcionarios detuvieron al propietario del matadero, identificado como Armando Antonio Herrera Rodríguez de 30 años, quien en la mañana de ayer fue puesto a disposición de tribunal de garantía de San Fernando.