Felipe Alvear Silva
Fotos: J.P.
La pasada noche del viernes 9 de octubre, personal de la Bicrim de la Policía de Investigaciones de Santa Cruz llegó hasta Los Bajos, en el sector de Yáquil, en la comuna de Nancagua, para constatar la denuncia de una vecina del lugar que afirmaba haber visto a cerca de 40 cerdos flotando en las aguas del Río Tinguiririca, varios de ellos fueron posteriormente arrastrados por el torrente.
Al llegar hasta el lugar, la policía verificó la información viendo a varios de estos animales muertos en las caudalosas aguas del río, en estado de putrefacción, siendo devorados por aves rapaces. También notaron que la totalidad de los animales llevaban en su cuerpo una marca con la sigla P 9, lo que significaba que podían haber tenido un dueño.
“Uno de mis trabajadores que pasaba por el lugar, observó los chanchos en el río, me avisó y de inmediato llamé a Carabineros; este lugar se convirtió en un foco de infecciones, en otras oportunidades han aparecido envases de líquidos tóxicos botados en el agua; no sé si vienen de alguna feria o simplemente los botaron; acá hay responsables y las policías deben encontrarlos”, señaló aquel día, la vecina que denunció la situación, Isabel Fernández.
Hecho en investigación
Al lugar llegó personal del SAG de San Fernando, más la Bicrim de Santa Cruz y la Bridema –Brigada de Desastre Medioambientales- de la PDI de Santiago, para realizar las investigaciones que permitan saber qué pasó con este extraño caso que contaminó y dejó con un apestoso olor las aguas del Río Tinguiririca.
La investigación quedó en manos de la Bridema que tomó muestras de los chanchos para ser estudiadas en sus laboratorios especializados de Santiago. El comisario Marcelo Serey, Jefe de la Bicrim de Santa Cruz, señaló que concurrieron nuevamente el pasado martes hasta el lugar donde fueron encontrados los cerdos, junto a personal del SAG, para seguir realizando pericias paralelas al trabajo de la Bridem, para ayudar a esclarecer los hechos y descubrir a los culpables de esta situación.
Cerca del lugar donde fueron encontrados los cerdos, existen criaderos, por lo que no se descarta que los hayan ido a tirar hasta ese sector del río, desde las chancherías cercanas u otras más lejanas. También se maneja la hipótesis de que los cerdos hayan muerto por asfixia, es decir, mientras eran transportados pueden haber muerto varios por una sobrecarga del camión, lo que habría provocado la falta de aire y la posteriormente muerte de los animales.
Bajada de fotos:
Foto1: Los cerdos fueron encontrados con la sigla –P 9- marcada en su cuerpo.
Foto2: Personal de la PDI y el SAG trabaja para saber las reales causas del hecho.