Ex gerente no pudo acreditar propiedad de los terrenos
.Se rechazó la querella de amparo y restitución, interpuesta por el otrora funcionario. Los accesos al recinto de juegos, siguen en disputa.
Manuel Polgatiz C.
Fotos: Nico Carrasco G.
Hace no menos de un mes atrás, Andrés Zaror -ex gerente general de la sociedad controladora del Casino Monticello (2004 y 2007)- interpuso una acción judicial en el Primer Juzgado Civil de Rancagua. El fundamento del libelo, estaba dirigido a reestablecer la posesión los terrenos ubicados al costado poniente de la Ruta 5 Sur, a la altura del kilómetro 56, en el denominado Lote B (137.104 metros cuadrados). Según el abogado de profesión, el despojo le impide ejercer sus derechos en el predio, los cuales están debidamente garantizados por la posesión tranquila y no interrumpida durante más de un año completo.
De acuerdo al documento, los terrenos fueron adquiridos por tradición, sirviendo de titulo de dominio, un contrato de compraventa que suscribió por escritura pública. Para ejemplificar los actos posesorios -suscribe el texto- Zaror, “ha pagado contribuciones, cerramientos, plantaciones y distintas presentaciones a autoridades regionales”.
Sin embargo, y contrario a las pretensiones del querellante, la jueza suplente Paulina Chaparro, determinó que conforme a los antecedentes recopilados, Zaror adquirió el denominado Lote B, “cuya superficie no fue posible determinar en la primera escritura (2007), la que fue objeto de rectificaciones, que no pudieron ser anotadas. Además hay escrituras posteriores, que tampoco fueron debidamente inscritas y en las que se amplía la superficie inicial adquirida”.
Se concluye por tanto, que el querellante tiene derechos inscritos del Lote B, no siendo posible determinar, si tiene posesión inscrita del resto de la propiedad o “propiedad residual”. Tampoco se pudo acreditar procesalmente, que la posesión la haya mantenido por más de año. Esos y otros datos que se acompañaron en juicio, determinaron que la sentenciadora, rechazara la demanda y favoreciera la posición de Casino Monticello, representado por el jurista, Juan Pablo Hermosilla.
ACCESO DE LA DISCORDIA
La génesis de esta difusa trifulca judicial, se retrotrae al preciso instante, en que el grupo de abogados asesores del local, interpusieron una querella criminal contra José Zaror. Los análisis de los juristas, determinaron que el ex gerente general, habría incurrido en graves faltas administrativas, que serían constitutivas de los delitos de estafa y simulación de contratos. Según los letrados, Zaror Abedrapo, compró terrenos colindantes al casino, argumentado que la adquisición sería la forma de asegurar los futuros accesos.
Sin embargo, las disputas con los propietarios de los sitios, impidió que la sociedad pudiera construir la red vial, antes del primer semestre del año en curso. Las acciones de ex ejecutivo, forzaron a los controladores del casino, a rediseñar el proyecto, además de implementar soluciones alternativas, todo con un costo de 10 millones de pesos. Para concretar sus actos -dice el documento acusatorio- Zaror utilizó información privilegiada y una vez desvinculado, “inició un agresivo esquema de presión, generándose escenarios de negociación ilegítimos, requiriendo, por su recién adquiridos inmuebles, precios total y absolutamente, fuera de mercado”.