Un curioso y lamentable caso policial se vivió durante la jornada del martes. Un joven de 17 años pasaba por la intersección de Escrivá de Balaguer con la Carretera El Cobre, cuando vio una camioneta Ford color rojo con las llaves puestas. La oportunidad no la desaprovechó, se metió al interior, la encendió y procedió a escaparse en el vehículo robado.
Contento por la oportunidad recibida, el sujeto identificado con las iniciales L.E.V.B. siguió su fechoría por la calle Miguel Ramírez, rumbo, seguramente a su casa. Al mismo tiempo, personal de Carabineros de la 3ª Comisaría buscaba al malhechor por el aviso que había dado el dueño. Pero la fortuna no lo acompañó, y a la altura de la Población San Luis, en la intersección de las calle Fresia y Magallanes, el delincuente perdió el control del móvil y chocó contra una casa del lugar.
Producto de la colisión, la residencia particular quedó con graves daños en su interior y fachada, ya que la camioneta se estrelló contra la pared y luego ingresó hasta el living de la casa. El joven, contuso y asustado, se dio rápidamente a la fuga dejando el vehículo botado en el lugar, cometiendo el grave error de dejar su teléfono celular en el interior del móvil.
Con esta importantísima prueba, la Sección de Investigaciones Policiales SIP de la 3ª Comisaría Oriente comenzó la pesquisa del antisocial. No pasó mucho rato para que los policías identificaran al individuo y fueran en busca de éste. Al llegar a su domicilio, lo Carabineros lo esperaron justo afuera de su casa, por lo que fue inmediatamente detenido una vez llegó al inmueble.
La camioneta, que quedó con serios daños en su carrocería, fue recuperada por dueño. En tanto el antisocial quedó detenido por el robo del vehículo y a disposición del Juzgado de Garantía.