Felipe Alvear Silva
Una casa completamente destruida, otra con su entretecho totalmente incinerado y un auto quemado en su parte delantera que lo deja inservible, fue el saldo de un incendio ocurrido durante la mañana de ayer en el pasaje Santa Ester de la Población Santa Teresa, en la comuna de Machalí.
A las 8:30 horas, la oficina del Cuerpo de Bomberos de Machalí recibió una llamada que prevenía de un siniestro ocurrido en el sector de la calle 18 de Septiembre en la Población Santa Teresa. De inmediato personal de la 1ª Compañía de Bomberos de la comuna concurrió hasta el lugar, que, tras ver la magnitud del incendio, pidieron apoyo a la 5ª Compañía de Rancagua.
Las llamas que salían desde la casa número 741, se comenzaron a esparcir por las residencias aledañas, lo que intentó ser amagado por personal bomberil. A pesar de los esfuerzos de los voluntarios, el fuego llegó hasta el entretecho de una casa vecina, lo que provocó la destrucción total su techo; según vecinos, el domicilio tendría seguros comprometidos. El domicilio del otro lado, quedó sólo con quemaduras menores en la canaleta del segundo piso.
Pero la casa donde comenzó el incendio, quedó completamente destruida producto del fuego que arrasó con todo, incluido el segundo piso de madera. El auto Suzuki Sx4, que presentaría seguros, se encontraba estacionado adentro de la propiedad por lo que quedó incinerado en su parte delantera —incluyendo el motor y su interior—; quedó inutilizable. Afortunadamente el único residente que había a esas horas en el domicilio, logró salir con la ayuda de los vecinos, ya que padece de un trastorno físico que le impide caminar normalmente.
El comandante del Cuerpo de Bomberos de Machalí, Santiago Pérez, señaló que el trabajo de los más de 20 voluntarios que se presentaron en el lugar, se extendió por cerca de una hora y media, en que trabajaron arduamente para controlar el fuego que amenazaba con extenderse a las casas vecinas.
Afortunadamente, de los cinco residentes que habitaban las dos casas, no resultó nadie con lesiones. Además, ni uno de los voluntarios que concurrieron hasta el lugar del siniestro quedaron con quemaduras o con problemas respiratorios. El único ser vivo afectado en el hecho fue una pequeña perrita que se encontraba adentro de la casa incinerada; lamentablemente su paradero es desconocido, y hasta la tarde de ayer, no se habían encontrado sus restos.