Manuel Polgatiz C.
Fotos: Gentileza 2ª Comisaría de Carabineros de Graneros
La señora Lorena Arias, estaba fuera de sí. Presurosa y nerviosa, llegó hasta las dependencias de la 2ª Comisaría de Carabineros de Graneros. Poco se le entendía. Sus palabras eran entrecortadas. El balbuceo, impedía identificar con claridad, el motivo de su presencia. Los ojos vidriosos, denotaban sufrimiento. Las manos sudadas y el rostro desencajado, eran expresión del calvario que en ese instante, llevaba consigo. “Necesito ayuda, mi hijo se está muriendo”, gritó. Señaló en breves frases, que su primogénito estaba impregnado de un color violáceo, pues había ingerido una moneda que le impedía respirar con normalidad.
Sin pensarlo dos veces e impulsado por el espíritu de ayuda al prójimo, concurrió hasta la morada, distante a escasos 50 metros del recinto policial, Ángel Martínez Romero, efectivo que en esa jornada cumplía su rutinario turno. Observó al menor de 6 meses de edad y desarrolló las maniobras tendientes a extraer la moneda ($10). Presionó levemente su espalda y realizó masajes. Tras unos segundos, el lactante expulsó el objeto contundente, generando total algarabía entre los presentes. Ya en el centro de salud de Graneros, el médico que recibió al paciente, confirmó que el menor sólo había sobrevivido como consecuencia de la efectiva maniobra del carabinero Ángel Martínez.