Presos de la comunidad terapéutica “Camino a la Vida” de la cárcel de Rancagua confeccionan las tarjetas navideñas.

Un mensaje cargado de esperanza y significado será el que envíe durante esta navidad la Defensoría Penal Pública, pues serán tarjetas realizadas por manos de personas privadas de libertad y que están en proceso de rehabilitarse del consumo de drogas las que llevarán el saludo institucional de fin de año a las autoridades locales y nacionales.
Durante el mes de Noviembre y gracias a una alianza realizada con la empresa concesionaria de la cárcel de Rancagua, SIGES, los 25 internos de la comunidad terapéutica “Camino a la Vida” fueron capacitados en artesiana de pequeño formato, técnica que utilizaron para fabricar las más de 100 tarjetas
“Para nosotros este es un trabajo que nos permite demostrar a la gente que podemos hacer cosas buenas, que si nos dan las herramientas podemos ocupar mejor nuestro tiempo y trabajar en nuestra resocialización. Es lindo que mientras muchos políticos no crean en la reinserción social, otras instituciones como la Defensoría nos permita ser los ejecutores de su saludo oficial”, manifestó Domingo Cañas, interno que lidero el equipo que confeccionó las tarjetas.