Felipe Alvear Silva
Foto: Marco Lara
Detenida en espera de ser puesta a disposición del Tribunal de Garantía —que será hoy en la mañana—, quedó la mujer identificada como N.F.M.G. de 20 años, que durante la madrugada del domingo sufrió un aborto que le costó la vida a los dos hijos que tenía en gestación, tras tomar pastillas especiales para interrumpir los embarazos.
El hecho sucedió cuando la joven de Pichidegua decidió no tener a sus hijos por motivos económicos, ya que a su corta edad ya tiene uno de un año y medio y la llegada de dos más la complicaría. Para esto se contactó vía internet con una mujer que se dedica a estos ilícitos, la que le cobró 110 mil pesos por pastillas, que son especiales para producir aborto —pero que de verdad sirven para el tratamiento de úlceras gástricas asociadas al uso de antinflamatorios no esteroidales—.
Con la droga lista, la mujer comenzó el pasado jueves a consumir las píldoras que se suministran vía vaginal, siguiendo las instrucciones que venían con los comprimidos. Tras consumir los productos los días viernes y sábado, la joven comenzó a sentirse mal, por lo que tuvo que ser llevada de urgencia al Consultorio de Pichidegua, lugar donde fue trasladada al Hospital Regional de Rancagua. En el principal centro asistencial, la mujer dio a luz a los gemelos de 19 semanas de gestación a las 2:25 horas de la madrugada del domingo, pero tres horas más tarde ambos fallecieron.
Detenidas
Debido a los restos del medicamento que se encontró en la vagina de la mujer, el hecho fue comunicado al Ministerio Público de Rancagua, por lo que la fiscal Gabriela Carvajal dispuso las pericias de la Brigada de Homicidios de la PDI de Rancagua. En las primeras diligencias realizada por la BH, los detectives lograron establecer que la persona que había vendido las pastillas era de la Región de Valparaíso.
Según la información entregada por el jefe de la BH, comisario Juan Sánchez, se coordinó con la PDI de Quilpué la detención de la responsable de la venta de las pastillas abortivas por internet, identificada como N.L.M. de 33 años. Tras el arresto, la mujer —que tenía antecedentes por uso malicioso de documento bancario— confesó la comercialización de las píldoras, por lo que fue traída a Rancagua donde quedó formalizada por su participación en el asunto.
Efectivos de la BH continuarán las investigaciones del caso, con el fin de lograr dar con los responsables de abastecer a la imputada de 33 años con las pastillas abortivas y para conocer si existen más mujeres que hayan consumido las píldoras con el fin de producir la anticoncepción.
