Fotos: Gentileza Codelco Chile, División El Teniente
Todo el país celebró el rescate, sin lugar a duda los grande protagonistas de la jornada fueron los 33 mineros atrapados, pero de no ser por los rescatistas, muchos de ellos de Rancagua, tal vez aún estarían enterrados en vida.
A continuación las primeras impresiones tras la tarea cumplida de los dos mineros locales, -de El Teniente- que pusieron toda su experiencia y profesionalismo en este ya histórico rescate, a ellos les tocó bajar a las profundidades de la tierra a ayudar a los 33.
JORGE BUSTAMANTE 41 años, casado 2 hijos Nivel Sub 5 Esmeralda.
¿COMO FUEL LA LLEGADA? FUE IMPRESIONATE, VER A LAS PERSONAS. Lo más impresionante era la ropa. Vestían como con unos pañales porque el calor era insoportable. También me llamó la atención a la calidez de las personas, Nos daban las gracias, pero nosotros le agradecíamos a ellos por permitirnos ayudarlos.
¿Qué le tocó hacer? Nuestra labor era preparar a las personas para subirlos a la jaula. Les colocábamos el arnés, les dábamos instrucciones para posicionarse en la jaula. Cómo funcionaban los accesorios de seguridad, el sistema de desacople de la jaula en caso que se trabara. También les mostramos los accesorios para que supieran como funcionaban los sistemas de seguridad.
También le conversábamos para tranquilizarlos. Tenían aprehensiones con la jaula, así que nos preocupamos hartos de calmarlos. Les dábamos ánimo, los alentábamos cuando subían por el tubo.
¿En qué pensaba cuando estabas adentro? Lo primero que uno piensa es en la familia y en las familias de los mineros. Darle la felicidad a esas personas no tiene precio.
¿Qué va a hacer ahora? Lo primero es juntarme con mi familia, compartir las experiencias y disfrutar el reencuentro. Nosotros no somos héroes. Se nos pidió participar en una misión, pero siempre nos motivó juntar a los compañeros con sus seres queridos. Ese recuerdo lo voy a atesorar para siempre.
En la mina El Teniente trabajo recuperando las galerías en mal estado. Eso es lo que me gusta y lo voy a seguir haciendo.
¿Qué te ha dicho tu familia? He recibido muestras de cariño de todos. En mi casa y en Rancagua están contentos y orgullosos de nuestro trabajo. Se sienten que a través de nosotros ayudaron en este rescate. Nosotros estamos orgullosos y que a todos nos pasa lo mismo.
¿En qué le marcó esta experiencia? Es algo imborrable… de un valor incalculable. Es difícil explicar tantos sentimientos. Me marcó para siempre. Es lo más importante que me ha pasado en la vida.
MANUEL GONZÁLEZ PAVÉS (46 AÑOS, CASADO 2 HIJOS DIABLO REGIMIENTO
¿Fuiste es el primero como te recibieron? Me recibieron súper bien, con vítores de viva Chile. Nosotros éramos su luz de esperanza.
¿Los abrazó? El Yohny se me tiró encima…. dos o tres me abrazaron y me besaron. Me dieron las gracias, pero yo se los agradecí a ellos. Después los calmé diciéndoles que por fin los íbamos a sacar.
¿Qué conversaban? No hubo muchos momentos de relajo, pero cuando podíamos conversábamos. Nos contaban sus momentos críticos, cuando les faltaba la comida, cuando no rompían los sondajes. Se quebraban cuando contaban, pero siempre tuvieron esperanzas porque sentían las máquinas. Me dijeron que nunca habían perdido la fe.
¿ La mina era muy distinta a El Teniente? Era radicalmente distinta. En Codelco contamos con los mejores estándares de seguridad. Aquí las condiciones de seguridad eran mínimas. Es como comprar un LCD última generación con una televisor en blanco y negro de los años 70.
¿Estaba muy nervioso por quedarse solo? No, más que nada nos relajamos porque habíamos cumplido con la misión. Cuando enviamos al último viejo nos abrazamos los rescatistas que estábamos en el fondo. Ahora cuando yo me quedé solo estaba contento. Súper feliz, pensaba en mi familia. Eso sí estaba mojado por el calor que hacía.
Ahora a volver a Rancagua …Ahora vamos a volver a la realidad. Después de una semana nadie se va a acordar de nosotros. Pero me gusta mi trabajo. Yo agradezco a Dios tener un trabajo bueno, que me permite educar a mis hijos. Ahora tenemos un nuevo orgullo por pertenecer a Codelco y sobre todo que en la empresa hayan confiado en nosotros.
¿Te preguntaban por tu afición al deporte? ¿Qué pasó con Franklin?Sí lo conocí en el año 85. Algo se acordaba de mí yo sí de él… si era mi héroe. Conversamos de fútbol, del deporte. Dice que va a armar un equipo, así que nos desafió a los mineros de El Teniente.