Por: Felipe Alvear Silva
Foto: Héctor Vargas
Finalmente terminó la angustia para la familia de María Angélica González Lizama, desaparecida desde el pasado martes 12 de octubre, ya que según lo informado por la Fiscalía Regional de Rengo, la menor de 13 años de edad logró ser ubicada por personal de Carabineros de la Cuarta Comisaría de la Prefectura de Cachapoal, en compañía de su pololo en la ciudad cachapoalina.
De acuerdo a lo informado por el Ministerio Público, la menor que estaba siendo buscada desde hace más de una semana por Carabineros y con la colaboración de los diversos medios de comunicación regionales, fue encontrada en compañía de su pololo con buen estado de salud. Además, tras la desaparición, la familia interpuso una querella por presunta desgracia.
El caso de la desaparición de la adolecente fue investigado por el jefe de la Fiscalía de Rengo, Servando Pérez, quien declaró que entre las diligencias que se han realizado, está la declaración de la menor, y no descarta que exista algún tipo de delito en la fuga de María Angélica junto a su pololo, lo que será informado prontamente a la opinión pública.
Rumbo a clases
El pasado martes 12 de octubre, la adolescente de 13 años María González se alistaba para asistir a una nueva jornada escolar en el colegio Francisco Correa, pero la menor de edad no sólo no ingresó al establecimiento educacional de Rosario, sino que no volvió a su casa, lo que provocó la desesperación de sus padres.
“La niña, en su trayecto a la escuela, no entró a clases. Y desde ese momento que no sabemos nada de ella. La locomoción pasa por el lado de la casa, en calle Arco iris. Mi hija tomó la micro, y viajó junto a su profesora de ella. La niña le dijo a la profesora que ella se bajaría antes, porque tenía que comprar algunas cosas. Pero resulta que ella no entró al colegio; eso fue todo lo que nos dijo a nosotros, y no sabemos nada de ella”, relató el desesperado padre de María Angélica, Francisco González, a tres días de su desaparición.
Según lo señalado por los padres de la adolecente, ellos mantenían una relación normal con María Angélica, pero que hace un tiempo atrás le habían dicho que el joven con el que pololeaba no le convenía debido a la diferencia de edad, ya que él tiene 17 años, cuatro más que su hija. Antes de desaparecer, la menor les envió un mensaje de texto a sus padres donde les decía: “quédense con el bomberito”, que es como llaman al hermano menor.
