Por: Daniella Girardi
Fotos: Marco Lara
En la madrugada del viernes 26 de noviembre, unos antisociales ingresaron a la Filial Rancagua de Cruz Roja ubicada en Campos #563. Los sujetos entraron al recinto aproximadamente a las 03:30 rompiendo la protección de una ventana lateral de una sala de reuniones y sustrajeron un plasma, el dinero de la caja de fondos, un data show, entre otros materiales.
De esta forma, la Policía de Investigaciones (PDI) llegó al lugar en horas de la mañana para realizar las pericias correspondientes. Mientras que las especies más el dinero sustraído fueron avaluadas en más de 978 mil pesos, cifra que aumentaría con los gastos de reparación de los destrozos.
“No vamos a recuperar lo perdido, así que tenemos que seguir trabajando. La filial no recibe subvención municipal ni de la Cruz Roja, ya que ésta obtiene ayuda cuando hay catástrofes, es autosuficiente porque cada filial debe generar sus propios recursos. Acá trabajan con dentistas y matronas que dejan un porcentaje de su trabajo para la Cruz Roja, pero esa recaudación del lunes, martes y miércoles desapareció”, cuenta Paulina Benítez, directora de comunicaciones del Comité Regional.
Hace dos años atrás, también ingresaron a robar a la oficina de la Cruz Roja a través de una ventana, por lo que tuvieron que colocar protección, sin embargo, esta vez no fue suficiente debido a que los ladrones llevaron herramientas para romperlas. Así, las funcionarias de la filial, Julieta Mardones y Patricia Mora, creen que los delincuentes estuvieron un buen tiempo dentro del edificio, ya que trasladaron la caja de fondos desde la oficina de la presidenta hacía otro lugar para sacar los cheques y el dinero de su interior.
“Debe haber sido bastante el tiempo que estuvieron allí porque pudieron cambiar de lugar la caja fuerte que es bien pesada y registrar los casilleros. Además, estuvieron hasta la parte de atrás e inspeccionaron las bodegas de acción social donde se guardan las donaciones”, señala Patricia Mora.
Finalmente, las voluntarias estuvieron de acuerdo en que la situación que se viene para la filial de la Cruz Roja no es la mejor. “Luego del terremoto tuvimos muchos deterioros acá en la oficina y tuvimos que sacar de la plata que habíamos reunido. Y ahora vamos a tener que arreglar todo el desastre que dejaron los ladrones y con menos fondos de los que teníamos antes”, afirma Julieta Mardones.