Por: José Pinto / Daniella Girardi
A los pies del cerro Quillayquén de Coltauco se encuentra la casa de Claudia Lobos Abarca, la cual fue construida con puros desechos, basuras, botellas plásticas, neumáticos y bolsas de nylon.
Cansada de trabajar 12 años en un laboratorio en la Región Metropolitana y vivir 30 años conviviendo a diario con los ruidos de la capital, decidió buscar otro rumbo que le diera tranquilidad. Por eso, tomó sus maletas junto a su hijo y se trasladaron al campo, a la localidad de Coltauco, donde se instaló en una casa en el sector de Rinconada de Parral.
Pero su sueño no terminó ahí, ya que luego de quedar sin casa debido al terremoto, llamó a un amigo para que le ayudara a confeccionar el hogar ecológico que siempre anheló. Así, comenzó a juntar basura como cartones, botellas plásticas, neumáticos y todo lo que pudiera para la construcción de su casa ecológica.
En marzo inició la construcción en un terreno que le había dejado como herencia una abuelita y empezó a colocar paneles de madera rellenos con los envases de bebidas plásticas y nylon estucados con barro. Claudia construyó todo con sus propias manos y ya en noviembre le estaba dando sus últimos retoques, decorándola con botellas de vidrio entre el barro. Además, como todo es natural en su construcción, ésta no tiene luz por lo que instalará paneles solares y el agua es extraída de un pozo en forma natural.
-¿Cómo le llaman a tu casa tus colegas?
La casa ecológica, aquí hay depositado miles de kilos de basura rellena en botellas de plástico y decoradas con botellas de vidrios en las paredes, es algo maravilloso porque creo ésta es la única casa de basura en Chile.
-¿No crees que es un buen negocio como para proyectar en un futuro las casas construidas en basuras?
Sí, podría ser, pero la verdad, éste fue mi sueño y si alguien quiere que lo asesore que comience a juntar desechos y le daré una manito para que tenga una casa tan linda como ésta.