El día 7 de Diciembre, habrá misa a las 20:00 horas, para luego dar paso al Canto a Lo Divino con cantores de la zona que rendirán homenaje a la Virgen. Las misas continuarán a las 12:00 de la noche, a las 02:00, 04:00, y a las 06:00 de la mañana, además de confesiones.
Fernando Ávila Figueroa
Miles de personas se espera que este viernes lleguen hasta el Santuario de La Compañía para conmemorar la Inmaculada Concepción de la Virgen María, sin embargo, las actividades comenzaron hace algunos días atrás. Así lo dio a conocer el Rector y Párroco del Santuario, Padre, Aquiles Correa Reyes, quien sostuvo que desde el inicio del Mes de María comenzaron los preparativos con distintos grupos de la Parroquia y niños que se preparan para recibir el sacramento de la comunión.
El domingo pasado la imagen de la Virgen recorrió las calles de La Compañía, fiesta que tuvo baile religiosos, oraciones y alabanzas. Ayer miércoles a las 20:00 horas estaba programada una misa de sanación, donde estaría presente el Padre Luis Escobar de Rancagua.
El día 7 de Diciembre, habrá misas a las 20:00 horas, para luego dar paso al Canto a Lo Divino con cantores de la zona que rendirán homenaje a la Virgen. Las misas continuarán a las 12:00 de la noche, a las 02:00, 04:00, y a las 06:00 de la mañana, además de confesiones.
Ya durante el día del 8 de Diciembre, habrá misa a las 07:00 de la mañana, cada una hora, hasta las 20:00 horas, con el sacramento de la reconciliación y la confesión El Santuario estará abierto hasta las 22:00 horas. “Estamos preparados para recibir a los peregrinos, tenemos las instalaciones para que cumplan sus funciones, esperando que lleguen los jóvenes, los agentes pastorales que tendrán su servicio y función para recibir a los peregrinos”, dijo el Padre.
Respecto a la gran afluencia de comercio al lugar, el Padre indicó que ellos se preocupan del tema religioso, devoción que asegura nunca se ha perdido. Entiende que para los comerciantes este es su trabajo, citando como ejemplo que existen escritos que datan del año 1870 donde los sacerdotes de la época cuentan su experiencia, y donde se destaca que alrededor del templo siempre ha existido el comercio, sin perder el sentido de acercarse al Señor y a la Virgen en su día .
El Padre Aquiles recomendó a que lo fieles lleguen con su botella de agua para así poder hidratarse y protegerse del calor, con el fin de tener un día de fe, de peregrinación, donde ellos puedan vivir la fe y la puedan trasmitir.