-Consultado sobre el tema, afirma que el futuro recinto tampoco debería emplazarse en Rengo o en San Fernando. Lo anterior, pues en dichas comunas alojarán dependencias de la Universidad de O’Higgins. En cuanto a los lugares que han manifestado su interés por albergar el Centro de Formación Técnica, reveló que aparte de los alcaldes de Pichidegua y Pichilemu, los ediles de la capital de Colchagua, San Vicente, Marchigüe y Santa Cruz también han expresado su intención.
Marcela Catalán
Entre los años 2020 y 2021 debe comenzar a funcionar el Centro de Formación Técnica (CFT) Regional, comprometido por la Presidenta Michelle Bachelet. En ese contexto es que opera una comisión de trabajo, presidida por el intendente Pablo Silva y en la cual participan diferentes autoridades e instituciones, entre quienes se encuentra el seremi de Educación, Hernán Castro.
Desde la instancia han organizado seminarios para conocer las aspiraciones de alumnos, profesores y apoderados en relación al futuro recinto, además de haber recibido a expositores con ponencias en torno al tema. Aquello, con el fin de que los integrantes de la mesa dispongan de antecedentes para tomar buenas decisiones acerca del proyecto. La información recopilada también ha sido facilitada al equipo de la Universidad de O’Higgins que elabora una propuesta sobre la iniciativa, la cual debe ser entregada en los próximos días.
“Lo más importante es definir su orientación”, argumenta el seremi de Educación. A su juicio, dicho aspecto debería apuntar a “la demanda de desarrollo de O’Higgins, contemplando sus vocaciones productivas”.
“Pero también hay otras cosas que le demando al CFT”, señala Castro. “Por ejemplo, certificación en oficios” para quienes tal vez sólo cursaron hasta octavo básico. “Igualmente me gustaría que tuviera una formación clara respecto a lo público, y que sea capaz de perfeccionar a los distintos empleados de una empresa”, analiza.
A su parecer, la futura institución debería “ser parte de una red que vincule la formación inicial (de los liceos técnicos) con la profesional (de la universidad)”. Además, el seremi da cuenta de la importancia de las relaciones del establecimiento con el mundo empresarial.
Por otro lado, Castro aboga a favor de que el recinto pueda cerrar carreras. “Debe operar de manera dinámica, según los requerimientos del mercado laboral y las proyecciones vocacionales productivas de la zona. Por eso, si por ejemplo impartimos equis carrera y hay muchos titulados suyos, deberíamos detener el ingreso. No es lo mismo que cerrar, pues la carrera sigue siendo parte del organismo. Y si después vemos que se requieren titulados, se abre. Hoy estamos en un mundo muy cambiante, por lo cual cerrar carreras significa burocracia”, arguye sobre esta materia.
Respecto a cuándo se definirá al futuro rector de la institución, la autoridad explica que aquello ocurrirá “cuando tengamos clara la ubicación” del plantel. Lo anterior, pues quien llegue a dicho cargo “debe echar a andar (el espacio), sacar patente, construir las mallas curriculares”, entre otras cosas.
UBICACIÓN
En línea con la autoridad, el CFT de O’Higgins no podrá partir en más de una comuna, “porque la ley establece que comienza con una sede con cuatro carreras”. En vista de ello, asegura que después se evaluará su funcionamiento bajo esas características. “Todo el mundo está pendiente de dónde se emplazará el recinto, pero para mí eso es lo más intrascendente”, sostiene.
Vecinos de Pichilemu ya han explicitado su interés por alojar el CFT Regional, para lo cual asistieron a la comisión administrativa. Por su parte, el alcalde de Pichidegua ha expresado su intención de modo informal y en los medios de comunicación. Para alcanzar su cometido, ediles de ambos sitios también fueron hasta el Consejo Regional. “No sé por qué acudieron a esa instancia, porque (sus integrantes) sólo definen los dineros que podrían necesitarse para el proyecto, pero no su orientación. Eso sí lo realiza esta comisión”, rebate Castro.
A los anteriores intentos se suman las tratativas verbales de los alcaldes de “San Fernando, San Vicente, Marchigüe y Santa Cruz”. En palabras del seremi, desde este último lugar hablaron “de disponibilidad” para que el espacio se emplace allí.
En relación a la posibilidad de que el CFT se construya en Rancagua, es enfático. “En mi opinión, en tanto Hernán Castro y no como autoridad, no debería situarse acá, como tampoco en Rengo ni en San Fernando, porque en esas comunas tenemos una universidad. El CFT es otra alternativa, pero también debe tender a una mirada regional a través de la instalación. Asimismo hay que considerar la accesibilidad del sector y si (allí) existen campos de práctica. Quizá para muchos la capital de O’Higgins es una buena plaza, aunque la sobresaturaríamos si pensamos que tiene una oferta bastante alta de estos recintos”, arguye.
No obstante, el seremi adelanta que la institución “podría expandirse a más lugares” cuando ya se haya consolidado en su primera sede. Pese a ello, observa: “no se debe obedecer a presiones populares a la hora de tomar dicha decisión. No debemos actuar para congraciarnos con la gente. Hay que ser honestos, para generar especialidades con campo laboral” real.
Además la autoridad revela que la comisión aspira a un sello distintivo para el CFT Regional, con una formación y modelo de gestión diferente. En línea con él, las mallas curriculares también deberían dar énfasis a las competencias blandas. Esto, sin dejar de lado las técnicas. “Ojalá tenga formación dual. Me refiero a cuando la formación técnica se realiza en la empresa y la general en el plantel”. Igualmente esgrime que el establecimiento “no sólo debería instruir técnicos o capacitar, sino que también producir tecnología”.
Asimismo, el seremi comenta que la instancia proyecta un CFT impulsor de “las capacidades innovadoras y emprendedoras de sus alumnos. Pero esto último no sólo entendido en el marco de una empresa, sino que en la vida”, y una articulación del currículo. “Si un estudiante es técnico de un liceo y después quiere ingresar al centro, no debería cursar dos años y medio más”, remata.