Luego de la segunda convocatoria, la empresa que se adjudicaría el proyecto superó en $1000 millones el monto destinado para su materialización. Mientras el MOP tramitaba la obtención de dicho dinero, el privado se retractó de su oferta económica y afirmó que se requerían otros $400 millones. Por ello, las autoridades decidieron declarar desierto el concurso.
Marcela Catalán
La construcción de la denominada Capilla de Gaudí sufrió un nuevo traspié. Y es que el Ministerio de Obras Públicas llamará a una tercera licitación para concretar el diseño del arquitecto español, luego de que la segunda convocatoria fracasara. Los antecedentes son los siguientes: la empresa que se adjudicaría la iniciativa superó en $1000 millones el monto oficial destinado a su materialización -era la que menos dinero demandaba para concretar el plano-, por lo que la cartera tramitaba la obtención de dichos recursos vía sectorial y a través del Gobierno Regional. En eso estaban las autoridades del ramo, cuando el privado se retractó de su oferta económica y afirmó que se requerían además otros $400 millones. En vista de las circunstancias, el MOP resolvió realizar otro proceso.
La primera licitación de la propuesta se vio frustrada en abril de 2017, con posterioridad a que la empresa encargada de las faenas abandonara los terrenos y se declarara en quiebra. En esa oportunidad los trabajos tuvieron un progreso físico de poco más de un uno por ciento.
De acuerdo con Natalia Sánchez, seremi de Obras Públicas, el 5 de octubre del año pasado efectuaron la apertura técnica y económica del segundo concurso. “La oferta más económica sobrepasaba en $1000 millones el presupuesto oficial. Por eso gestionamos los montos adicionales mediante recursos sectoriales y del Gobierno Regional, esto último vía Subsecretaría de Desarrollo Regional”, sostiene.
“Cuando estábamos en pleno proceso (de solicitud y obtención de esos dineros), el 12 de diciembre, la empresa nos presentó una carta de desistimiento de su oferta. Argumentaron que la partida asociada a las piedras dioritas había subido su valor respecto al que ellos señalaron antes. Hicimos las gestiones para ver de cuánto hablaban, porque ya no sólo se trataba de los $1000 millones; era un déficit mayor. Por parte baja, eran $400 millones más”, explica la autoridad.
En palabras de Sánchez, luego de que la cartera llevara a cabo sus indagaciones correspondientes, comprobaron que el nuevo monto solicitado sí tenía sustento. “Nos preocupamos de ver que no se tratara de un aumento porque sí, corroborando que efectivamente había crecido su partida. La Corporación Gaudí también hizo gestiones con otros privados, para averiguar si esa diferencia podía ser cubierta bajo otra figura (…) Se estableció un plazo de poco más de un mes, pero al final no se llegó a un acuerdo con la constructora”, arguye.
En línea con la seremi, en el marco de la misma licitación, el oferente que quedó en segundo lugar pedía $1700 millones arriba del monto original destinado al proyecto. Fruto de las novedades, dado que su propuesta económica ahora sí se acercaba a la de la empresa que estuvo a punto de adjudicarse la iniciativa, el MOP determinó llamar a concurso por tercera vez. “La situación complicaba el trato igualitario ante los oferentes. Frente a este panorama, decidimos aceptar la carta de desistimiento, procediendo a una nueva convocatoria a licitación. No podemos incrementar un monto infinitas veces, para una propuesta financiera que ya requería otros $1000 millones desde sus inicios”, observa.
Al respecto, la autoridad argumenta que la Dirección de Arquitectura del ramo arrojó un análisis técnico presupuestario negativo. “Cuando te excedes de cierto valor, se considera que está sobrevalorada (la iniciativa). Por tanto, muy importante y emblemático será el proyecto, pero eso no significa que lo adjudicaremos a cualquier precio. Esto también tiene sus límites, en criterio y en norma”, esgrime.
Con todo, Sánchez afirma que fruto de las gestiones sectoriales y con el Gobierno Regional, la tercera licitación sí contará con otros $1000 millones. El financiamiento original era de $5289 millones hasta antes de octubre del año pasado.
Hoy la cartera tramita el cierre administrativo del segundo llamado, para dejar sin efecto o desierto el proceso -según corresponda-. La seremi añade que la nueva convocatoria debería ser publicada durante la primera quincena de febrero, otra vez vía electrónica. Es decir, la apertura de ofertas técnicas y económicas se efectuaría durante la última semana de marzo. “Después de 30 o 60 días se realizaría la toma de razón por parte de Contraloría, por lo que a fines del primer semestre de 2018 deberíamos retomar las obras”, apunta.
“Si bien es cierto que ha costado llegar a una adjudicación que se encargue de ejecutar las faenas, todavía se está a tiempo de que la empresa (que gane el tercer concurso) se interese de verdad, no sólo por un tema de negocios, sino que también por lo emblemático de esta iniciativa. Hemos tenido un gran apoyo de parte de la Corporación Gaudí, en cuanto a incentivar a los privados para que se interesen en participar”, agrega la secretaria regional.
Consultada acerca de las razones de fondo que explican los continuos traspiés del proyecto, Sánchez declara que ello se debe a la naturaleza propia de la propuesta. “Proviene de (Antonio) Gaudí. No cualquier empresa se interesa en participar en una licitación con técnicas constructivas distintas, pues estructuralmente implica un desafío, lo que otorga una complejidad extra (al concurso). Ése ha sido el factor más problemático a afrontar (…), lo que da espacio a temores con algún material o técnica constructiva a emplear. A corto plazo, eso puede significar un aumento en el valor”, subraya. En tal sentido, la autoridad llama a la “seriedad de las ofertas”.
“Por normativa, quienes postulen tienen 60 días para mantener (sus montos). La empresa del desistimiento cumplió ese plazo (…), pero después la cartera queda un poco a merced de que mantengan o no (los requerimientos de dinero), si es que todavía no adjudicamos. En el último caso, necesitábamos contar con los recursos en un documento formal”, sentencia, respecto de la petición de dinero que debieron hacer al mismo ramo y al Gobierno Regional.
En relación a la posibilidad de que postulen privados extranjeros, Sánchez lo descarta. “Esa modalidad no está contemplada para las licitaciones de (la Dirección) de Arquitectura. Sólo es posible para obras concesionadas, y esta iniciativa no lo es”, remata.