El DT del Capo de Provincia reconoció que Colchagua los superó, pero que ahora, en casa, tendrán que hacer méritos para avanzar y así dejar en el camino al elenco de la Herradura.
Ricardo Obando
Lo del domingo, dejó un sinsabor en las huestes de O’Higgins. Colchagua los superó en el trámite y de no ser por Luis Ureta, los celestes habrían vuelto a Rancagua derrotados. En ese conexto, el técnico Gabriel Milito reconoció que la expedición por San Fernando fue mala, y que de cara a la revancha de este miércoles a las 18.30 horas en el estadio El Teniente, tendrán la obligación de hacer bien las cosas para avanzar y ser el equipo que se mida contra la Universidad de Chile en octavos de final de la Copa Chile.
Al respecto, el DT del Capo de Provincia apuntó que esperaban un partido complicado en el estadio Jorge Silva Valenzuela a sabiendas que “habíamos visto en la Copa, lo que le cuesta a los equipos de Primera División cuando juegan con un equipo de una categoría menor”.
Es más, puntualizó que “sin la pelota, somos un equipo que se vuelve mucho más frágil y nos sucedió eso”. Y claro, los de la Herradura tomaron el protagonismo en el juego y los hicieron ver mal como dijo el entrenador.
“A veces hay que jugar como uno quiere, pero a veces como se puede. Intentamos adaptarnos a las condiciones de la cancha y del rival, y la verdad que el partido fue parejo y lo sufrimos”, expuso.
Junto con ello, sentenció que en San Fernando “nosotros imaginábamos ganar, pero también pensábamos un partido en el terreno de la disputa y no adueñarnos de la pelota por las condiciones de la cancha y nosotros somos un mejor equipo cuando tenemos el balón y asumimos esa responsabilidad”.
De cara al duelo de mañana, donde serán bajas Nicolás Mazzola y Roberto Cereceda (por lesión), Milito agregó que “tenemos que mejorar para poder pasar la eliminatoria”, esto porque en la ida, “estuvimos por debajo de nuestro nivel”.
Además, apuntó que en Rancagua y “en este tipo de eliminatoria, la obligación siempre es nuestra, y nosotros lo asumimos de esa manera también”.
DEFINIMOS EN CASA
En el plantel de jugadores, en tanto, tienen claro que no hicieron un buen partido, pero que mañana lo pueden sentenciar.
Así lo cree Joel Acosta. El delantero trasandino, que por estos días está negociando con el club su continuidad por lo que queda de temporada, manifestó que este cruce ante Colchagua, “es una llave abierta, pero definimos en casa”.
Además, dijo que en San Fernando sabían a lo que iban, porque la cancha era factor, porque era “un terreno que no estaba en las mejores condiciones. Si bien, eso no es una excusa, sabíamos que clase de partido veníamos a jugar”.
Junto con ello, dijo que Colchagua, por momentos, “claramente nos superó, creó más situaciones de gol que nosotros, generamos muy poco”.
Por su parte, Alejandro Márquez, dijo que pese al 0-0, “hay que estar tranquilos, a ninguno de los dos nos favoreció el resultado y tenemos que ganar sí o sí en casa”.
Adelantando lo que será el juego de este miércoles, el lateral volante comentó que “será un partido abierto para los dos equipos, pero nosotros con nuestra gente y en nuestra cancha lo sacaremos adelante”.
Finalmente, dijo que lo que pase en El Teniente “es responsabilidad de nosotros, estaremos en casa, jugando en cancha buena e iremos con todo”.
El buen debut de Ureta
El portero, recientemente medallista de oro en los Juegos Suramericanos de Cochabamba jugó sus primeros 90 minutos en el profesionalismo. Lo hizo de buena manera, es más, terminó siendo quién salvo a O’Higgins de una caída.
Al respecto, el oriundo de Rengo dijo estar “contento porque, para mi, fue un gran debut. Así me lo dijeron mis compañeros y el cuerpo técnico”.
Como figura del Capo de Provincia en este partido de ida, apuntó que cuando Colchagua llegó a fondo “tuve que responder”, y que antes del juego le manifestaron desde el cuerpo técnico que “me dijeron que no arriesgara, e hice las cosas bien”.