Alejandra Sepulveda
Jefe de Informaciones
Máster en Patrimonio Internacional y gestión de desarrollo local.
Universidad de Barcelona
Los mal llamados logotipos o marcas graficas de una ciudad son una herramienta de branding del lugar, y la nueva imagen presentada por la Municipalidad de Rancagua no contiene nombre, tipografía, color, dibujo o complemento característico de nuestra ciudad. Lo que hace es borrar toda la historia y dejar la ciudad sin imagen con que definir a Rancagua para su promoción.
Si usted ve este nuevo icono, no es diferente a cualquier aplicación web, sin identidad y sin enraizamiento en un componente común para los habitantes del lugar.
Para la creación de una nueva “imagen ciudad” lo primero que debemos hacer es una estrategia que nos hable de los atributos de esa ciudad, aquellos que queremos poner en valor y comunicar, así luego se refleja en los medios comunicacionales donde acompañamos a la nueva marca grafica.
En este caso queremos pensar que estamos dando paso a la nueva Rancagua digital, una Smart city donde la tecnología ayude a mejorar las relaciones y vivencias entre sus habitantes, ya que el logo viene acompañando a la APP de la ciudad lanzada hace algunos meses.
Pero ¿ser modernos es sinónimo de borrar la identidad? Eso no lo creo, hoy el municipio está viviendo una acción dicotómica, donde por un lado se crean rutas turísticas basadas en la historia y patrimonio de nuestra ciudad y, y por el otro, se pretende borrar los iconos que nos caracterizan. Un ejemplo de esto es no contar actualmente con un plan de desarrollo económico, turístico o cultural a largo plazo y con participación de los diversos componentes sociales como son empresarios, vecinos, entre otros.
Si una ciudad quiere transmitir un mensaje determinado a sus residentes, a sus turistas o a sus públicos potenciales debe aprovechar la marca gráfica para trasladar ese mensaje. De esa manera, ¿Cuál es el mensaje de esta nueva marca gráfica?, ¿Qué diferencia esta marca de otras que vemos todos los días?, ¿tiene que ver esta marca con la ciudad y sus habitantes?
Se supone que una ciudad que quisiera presentarse como dinámica y vibrante, debería contar con una marca gráfica que transmitiera esa sensación; de la misma forma, una ciudad que deseara transmitir una imagen de lugar cultural e histórico, debería inspirar esa impresión ya desde la elección de la tipografía, los colores y las imágenes asociadas que deben dar materialidad a su nombre.
Algunos académicos y profesionales opinan que la marca gráfica tiene una función comunicativa importante, en cuanto que es capaz de dar consistencia, coherencia y continuidad a los valores transmitidos por todo tipo de canales.
Por ejemplo José Fernández Cavia es Jefe del Departamento de Comunicación de la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona. Explica que el famoso I amsterdam no es solo un elemento decorativo, es toda una declaración de cómo la ciudad quiere presentarse ante sus públicos, externos o internos. El azul característico de la marca gráfica de Porto no es una elección al azar, sino la decisión intencionada de conectar con el pasado histórico de la ciudad y con uno de sus elementos culturales característicos. ¿qué representa el color rojo en el nuevo logo? ¿Qué representa su borde redondeado cuando siempre nuestra ciudad ha sido característica por su damero central? ¿Qué conexión tienen la raya sobre la R con los habitantes de la ciudad?
Estas son algunas de las preguntas que debieron hacerse los diseñadores y mandantes de la “nueva imagen” que nos representará a todos los Rancagüinos.
Kelly, M en “Analysing the complex relationship between logo and brand” señala que “la marca gráfica desempeña un papel relevante en el proceso de place branding, ya que tiene como objetivo despertar percepciones y crear asociaciones a una velocidad que ninguna otra forma de comunicación puede alcanzar”.
Ahora hago la última pregunta, ¿representa o quiere usted que este nuevo logo represente nuestra ciudad?