Además se confirmó que el imputado conducía en estado de ebriedad, y sin licencia de conducir, con 1.01 gramos de alcohol por litro en la sangre, quedó en prisión preventiva y se dieron 90 días de investigación.
Tras la audiencia de formalización de J.S.Q, de 31 años de edad, se determinó su prisión preventiva y 90 días para investigar el trágico accidente vehicular que el pasado martes les costó la vida a cuatro jóvenes en la Ruta By Pass de la comuna de Rancagua.
Durante la audiencia, el Ministerio Público entregó algunos antecedentes de lo ocurrido, entre ello que luego del examen de alcoholemia, se verificó que el imputado tenía 1.01 gramos de alcohol por litro en la sangre, lo que lo hacia conducir en estado de ebriedad. Además lo hacía sin licencia de conducir.
Los peritajes de la SIAT de Carabineros también determinaron que el accidente ocurrió en una vía recta y sin curvas, además, peritajes del Servicio Médico Legal muestran que los fallecidos presentaban lesiones atribuibles a politraumatismo, producto del volcamiento.
Se hizo presente que luego del accidente el imputado se dirige hasta las cercanías del Complejo Penitenciario de Rancagua con el fin de solicitar ayuda, reconociendo su participación en el hecho, así como se estableció que compartían en el domicilio de uno de los jóvenes fallecidos, en Machali, donde hubo consumo de alcohol, para luego dirigirse hasta el Casino Monticello a buscar a una amiga, originándose la tragedia en el regreso.
La defensa se opuso a la prisión preventiva, pese a que no cuestiona el resultado final de la conducción, aduciendo que lo hizo porque un amigo le pidió que fueran a buscar a su polola. Al momento de regresar, frente al complejo penitenciario, sufre un problema el móvil que lo hace perder la dirección y salir de la ruta.
Lo indicado por la defensa sostiene que el imputado baja y sale a solicitar ayuda en el complejo penitenciario, llama a Carabineros, por lo que se solicitaba el arresto domiciliario total, contrario a lo que pedía la Fiscalía, quien aducía ser un peligro para la sociedad por conducir en estado de ebriedad con causa de muerte.
PRISIÓN PREVENTIVA
Para el Fiscal, Lucio Ugas, al imputado se le comunicó el delito de conducir en estado de ebriedad con resultado de muerte, ya que debido a su estado etílico, perdió el control del móvil, volcando y resultando fallecidos sus cuatro acompañantes de entre 20 a 22 años de edad. Agregó que los peritajes demuestran que conducía en estado de ebriedad, descartándose por parte de la SIAT una falla técnica del automóvil, decidiendo el joven de manera voluntaria conducir el vehículo en ese estado. Sobre el exceso de velocidad es un tema que aún sigue en investigación.
La pena que arriesga es de 3 años 1 día a 10 años de presidio efectivo, sin embargo, aún pueden influir algunos atenuantes o agravantes, determinándose que circulaba sin licencia de conducir, reconociendo que si tuvo participación en los hechos, y que pidió ayuda a personal de Gendarmería del Complejo Penitenciario de Rancagua.
Para el abogado del imputado, Jaime Cárcamo, la medida cautelar era posible, ya que se trata de un delito bastante complejo, por lo que ahora queda apelar a la Corte con el fin de que la medida cautelar se reemplace de acuerdo a las circunstancias del hecho y no al resultado final.
El defensor sostuvo que un arresto domiciliario total podría ser suficiente para satisfacer la necesidad de cautela que invocó el Ministerio Público, añadiendo que de manera voluntaria el imputado siempre quiso prestar ayuda a su polola y a sus amigos, lo que consta en la carpeta investigativa, antecedentes que esperaba se hicieran valer, sin que se discutiera el fondo del hecho de si debe ser o no condenado, sino que resolver si debe o no permanecer en prisión preventiva.
La defensa planeta que pese a lo que indica el informe de la SIAT, el vehículo si presentó una falla que lo llevó a perder el control, por lo que espera que se realicen informes técnicos con mayor tiempo y detención que puedan evidenciar esta falla. Además adujo que la dosificación de alcohol está muy al límite entre conducir en estado de ebriedad, o bajo la influencia del alcohol.