“La Iglesia vive de sus fieles y para sus files, sirviendo al Señor. Por lo tanto, cada uno se debe preguntar en estos días. ¿Cómo voy a hacer yo para apoyar a la Iglesia, a los sacerdotes, a nuestros programas sociales, a nuestros comedores, a nuestros adultos mayores?”, señaló el administrador apostólico Juan Ignacio González.
Es que, si en los templos no pueden realizarse misas públicas, tampoco se recibe el aporte de las colectas y en muchos casos no se entrega el 1% a mi Iglesia. Por ello, las parroquias comienzan a tener problemas para mantenerse. “La generosidad de cada uno de los fieles para mantener funcionando nuestra realidad pastoral es muy importante”, indicó el obispo.
Cabe señalar que quienes no han recibido la visita mensual de las recaudadoras del 1% o no han ido a la oficina parroquial también pueden hacer su aporte en la cuenta corriente del Banco de Chile Nº200-05823-01, al rut 70.288.500-0, del Obispado de Rancagua.
Cabe señalar que en la Diócesis de Rancagua también se formó una Comisión para el Financiamiento de la Iglesia para evaluar las necesidades más urgentes.