Ximena Mella Urra/ Luis Fernando González V.
Menos de un año lleva en operaciones el Ministerio de Ciencia y Tecnología en el país con la promoción de la investigación científica en todas sus disciplinas, lo que implica las ciencias exactas, las ciencias naturales, las ciencias sociales y la investigación en Artes y Humanidades. Y para validar esta premisa, el Ministro de Ciencia, Andrés Couve, estuvo hace algunos días en la Región de O’Higgins donde aprovechó la oportunidad de visitar importantes establecimientos de investigación ligados al mundo del Agro, como son el Centro de Estudios Avanzados en Fruticultura (CEAF), el Centro del Agua para la Agricultura y el Centro de Estudios Rosario. Su presencia es parte de una agenda enfocada en la investigación y en los puntos prioritarios para la región en términos de agricultura y del uso y gestión del agua. “Gran parte de las oportunidades en ciencia, tecnología e innovación están en los territorios y nos ponemos al servicio del talento de las personas. Así asumimos un compromiso con el desarrollo de la ciencia regional”, reveló a nuestro medio.
En conversación con El Rancagüino, el secretario de la cartera de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación, describió que esta fue una visita muy productiva donde presenció a tres centros muy distintos, pero con grandes potencialidades en contribuir a la región y al país: “La visión que tenemos de los centros es que necesitamos diversidad y que son un pilar para el desarrollo científico en regiones. Necesitamos centros de investigación básica, que tengan como motivación simplemente la curiosidad en distintas áreas del saber, pero también necesitamos que estén enfocados en sectores productivos y en nuestras ventajas comparativas donde la ciencia de calidad se complementa con la pertinencia regional”. También fue para el ministro, una ocasión de conocer a los investigadores e investigadores y del vínculo que se forma entre estos, los productores y la educación de la región.
Couve recordó que en el 2000 se establecieron programas de investigación colaborativa al abrirse diversos centros que establecieron una manera distinta de hacer investigación en el país. “Lo primero que estos hicieron fue establecer una vinculación entre los investigadores de una temática en particular y hoy se conforman en centros multidisciplinarios para abordar desafíos, lo cual ha sido un cambio muy positivo. Es que en el Adn del ministerio está inserta esta premisa, que tenemos que hacer investigación asociativa”, explicó.
Haciendo una comparación a nivel regional entre el mundo agrícola y minero, en ambos casos-dijo- “tenemos una gran oportunidad para agregar más valor al producto final a partir de la investigación científica del conocimiento. En el agro está muy basada en el conocimiento, en la generación y adopción de variedades, en el uso de suelo, en eficiencia de riego, etc. Por lo tanto se genera una red de centros de investigación que ayuda a sofisticar a la industria en el uso del conocimiento. La minería en tanto, es una industria altamente tecnologizada, pero en general no es desarrollada en Chile convirtiéndose en una brecha muy grande en I+D, para poder producirla e invertir en polos tecnológicos que se puedan convertir luego en elementos de exportación”, analizó el máximo representante de esta cartera.
LA “TRÍADA” DEL AGRO
En el Centro de Estudios Avanzados en Fruticultura (CEAF), el secretario de Estado conoció detalles del programa de mejoramiento genético para frutales de carozo donde destacó este trabajo como “un ejemplo de cómo la investigación científica se puede llevar a cabo en estos centros y al mismo tiempo buscar dónde se pueden entregar soluciones”.
Couve visitó también el Centro del Agua para la Agricultura, en San Fernando, donde junto a la Intendenta Rebeca Cofré conocieron el proyecto que se realiza en el Liceo Agrícola El Carmen y el desarrollo de investigación en áreas como la gestión integrada de recursos hídricos y la eficiencia de sistemas de riego.
Finalmente se dirigió al Centro de Estudios Rosario (CER), donde destacó los esfuerzos para potenciar la investigación desde los territorios, a través de iniciativas como la desconcentración de la institucionalidad científica en cinco Seremis de Ciencia y el lanzamiento de un Programa de Fortalecimiento de Centros Regionales, para que estas instituciones puedan optar a financiamiento de la nueva Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo (ANID).
COVID 19
“Nos hemos dedicado al Covid 19 durante los últimos seis meses”, especificó nuestro entrevistado. Ello se replica a través del aumento de los test de PCR en la zona, gracias a que desde junio pasado, la Universidad en O’Higgins (UOH) es parte de la red universitaria de laboratorios Covid-19 impulsada por este Ministerio de Ciencia.
De igual manera el ministerio ha estado enfocado en la necesidad de una vacuna y en los fondos de investigación científica sobre crisis sanitaria que en esta región suman tres, todos ellos adjudicados en la convocatoria de la Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo(ANID) y el Ministerio de Ciencia por un total de $ 259.967.000. El primero de ellos lo lleva la UOH a través de un “Estudio epidemiológico observacional para evaluar el efecto de medidas de control gubernamentales sobre la dinámica espacio-temporal de COVID-19 en Chile”, a cargo del investigador Gabriel Arriagada Acevedo y un monto financiado de $80.550.000.
El segundo, también llevado a cabo por esta casa de estudios superiores, se adjudicó un monto de $90.000.000 y que tiene por finalidad la “Vigilancia activa mediante diagnóstico molecular de SARS-CoV-2 en potenciales reservorios silvestres” (Investigadora: Gemma Rojo Aravena). Y en tercer puesto está la “Efectividad de la transfusión de plasma convaleciente y del recambio plasmático terapéutico en pacientes con COVID-19”, ejecutado por el Hospital Regional Libertador Bernardo O´Higgins y con un monto de $89.417.000 bajo la tutela del investigador Carlos Flores Angulo.
FORMACIÓN DE TALENTOS
El ministro Couve también se refirió al desarrollo de talentos y el trabajo mancomunado para que este sea un proceso participativo. “Esto implica saber cómo ayudamos a mejorar la formación de los investigadores(as) y cómo los insertamos en el mundo laboral que históricamente ha sido la universidad. Creemos que deben insertarse mucho más en las empresas, en el Estado y en el mundo de la sociedad civil organizada”, indicó y agregó a su vez que están trabajando de la mano con el Ministerio de Educación y con la Comisión Nacional de Acreditación para buscar criterios comunes en cómo podemos formar y medir a estas personas.
Por otro lado, una de las divisiones de esta cartera ministerial es la de Ciencia y Sociedad la cual busca vincular a la ciencia con la comunidad. Una de sus unidades es Explora que lleva la ciencia a los niños, y crearon otra llamada Ciencia Pública. “Esta última lleva la ciencia a espacios culturales y la cultura a espacios científicos. Con Explora también puede incidir en la formación de talentos científicos desde la primera infancia a través de la creatividad y la curiosidad”, concluyó la autoridad respectiva.