En un control de rutina realizado por el personal de gendarmería de la cárcel de Rancagua que trabaja en el ingreso de encomiendas, encontró tres envoltorios de café que tenían sus embaces adulterados, y 8 cajetillas de cigarros sospechosas.
En ambos casos se trató de una sustancia vegetal de color verde que venía escondía en embaces adulterados, la experticia de los funcionarios logró de manera visual y luego en la revisión manual percatarse del engaño. El alcaide del Complejo Penitenciario de Rancagua, destacó que en el último tiempo se ha detectado un alto número de intentos de ingresar droga a través de la encomienda. “Producto de la pandemia hemos eliminado las visitas y aumentado las encomiendas y es por este lugar donde intentan ingresar elementos prohibidos es por ello que hemos tenido que reforzar los procedimientos de revisión”, dijo el oficial.
Por su parte el Director Regional, Coronel Leandro Pincheira, destacó el actuar de los funcionarios que cumplen a diario con la tarea de revisar y sanitizar los elementos que llegan desde el exterior. “Felicito el actuar de los funcionarios por su minuciosa labor, ya que de esta manera resguardan la seguridad al interior de la Unidad Penal”, dijo.
Finalmente, en ambos casos se dio cuenta al fiscal de turno quien instruyo al Equipo de Canes Adiestrados de la unidad realizar la prueba de campo y posteriormente remitir los antecedentes a la Fiscalía local.