Ricardo Obando
El sábado se integró al trabajo en el Monasterio Celeste y viene con ganas de jugar. Marcelo Larrondo, la nueva incorporación de O’Higgins de Rancagua, fue presentado oficialmente este lunes y confesó que viene con una mentalidad positiva para tratar de ayudar al conjunto celeste en su misión de escapar de la zona baja de la tabla.
“No vengo con la camiseta de titular puesta, pero voy a trabajar para que el técnico me tenga en cuenta desde el minuto uno”, dijo el chileno-argentino, que anteriormente vistió las camisetas de Fiorentina (Italia), Rosario Central y River Plate (Argentina), y que, en 2019, fue un aporte a la gran campaña que tuvo Unión La Calera.
En lo físico, Larrondo dijo que llega bien, ya que “estuve cuatro meses en Argentina entrenando, nunca estuve parado”, y que, en estos días que vendrán habrá que ponerse a punto con el balón para poder ser aporte.
Ahora bien, respecto al momento del equipo, el delantero tiene claro que “faltan 18 fechas y creo que tenemos material para conseguir el objetivo y estar tranquilos”. Es más, expresó que para salir de las últimas posiciones de la tabla, “la única forma en que se puede lograr es trabajando día a día, y creo que es cuestión de suerte y agarrar confianza para salir adelante, porque dos o tres resultados (triunfos) nos vuelven a meter en pelea”.
De paso, el chileno-argentino expresó que Augusto Batalla fue clave para su venida a Rancagua. “Con Augusto tenemos una amistad muy grande, pude compartir vestuario con él en River. También él influyó mucho para tomar esta decisión, lo mejor era venir a O’Higgins con mi familia y él influyó mucho en la decisión”.
UN DESAFÍO
Para el “9”, que en Rancagua ocupará la camiseta 21, el venir al “Capo de Provincia” es un gran reto para él.
“Cada decisión que uno toma es un desafío y este es uno grande para mi”, recalcó el jugador de 32 años. Es más, fue enfático en señalar que “llego en condiciones buenas y trataré de dejar una buena imagen, vengo con muchísima humildad y sacrificio”.
Además, aseguró que lo anterior se ve reflejado en que “en todos los equipos traté de dejar el máximo cuando me tocó ponerme la camiseta”.
De paso, recordó que con su llegada al equipo “va a ser una competencia interna buena, porque hay delanteros que tienen trayectoria y tienen un nombre. Y eso me pone contento, porque está bueno no relajarse y todos pensar en el club y sacarlos adelante”.
ESPERANDO EL DEBUT
Considerando las reglas del torneo, Larrando como otros refuerzos de los equipos nacionales, tendrán que esperar para su estreno.
Lo primero que tiene que pasar para aquello es que culmine la primera rueda del certamen. El fin de semana se jugará la última fecha, pero hay un inconveniente: no se han jugado todos los partidos. Esto porque hay duelos pendientes, especialmente de la Universidad Católica, y el calendario es muy ajustado para poder recuperarlos rápido, más cuando los cruzados tienen que jugar Copa Sudamericana.
Estos días de espera, dijo Marcelo Larrondo, le vienen bien. “Uno siempre tiene las ganas de jugar, si fuera por mi ya me pondría los botines para jugar ahora, pero lo más importante es sumar y ponernos bien físicamente, cosa que una vez que estemos adentro (de la cancha) tratar de no salir y ayudar al equipo”, cerró.
¿Un llamado a la Selección?
Hace algunos años, Larrondo fue convocado por Juan Antonio Pizzi a La Roja, pero las lesiones no lo dejaron actuar por la Selección. El año pasado, en La Calera, su nombre rondó Juan Pinto Durán y ahora con O’Higgins nuevamente aparece en el horizonte como una opción en el ataque.
Según aseguró, “todo jugador se ilusiona con jugar en la Selección, es algo muy importante y si te llaman es porque estás haciendo las cosas bien”, pero recalcó que “hoy mi objetivo es O’Higgins, tratar de hacer las cosas bien, ayudar al plantel y tratar de sacar al equipo, que es lo más importante”.
