Ricardo Obando.
Poco más de una semana resta para que O’Higgins de el puntapié inicial a la segunda rueda del campeonato 2020. Los celestes fueron programados para el viernes 13 a las 13.30 horas frente a Everton de Viña del Mar, y ahí es donde apunta Dalcio Giovagnoli y su cuerpo técnico.
El duelo, que será clave de cara a la tan anhelada remontada, está siendo preparado al interior del laboratorio celeste, en Requínoa, donde el DT busca afinar aspectos necesarios para poder incorporar su idea y conseguir subir el rendimiento grupal, pero principalmente individual, falencia que el estratega detectó y expresó luego de su arribo a Rancagua.
Tenemos que, dijo aquella vez, “elevar muchos rendimientos que, por lo que visualizamos nosotros, están por debajo de la media”, y también señaló que “nosotros necesitamos, tal vez, lograr tener un equipo mejor posicionado y mejor ordenado, porque ayuda a correr mejor la cancha y posicionar los movimientos”.
En la jornada de este miércoles, justamente hizo hincapié en eso. Posicionamiento en el campo de juego, pases correctos, transiciones ofensivas y defensivas, fue parte de lo que se trabajó.
Cabe señalar que, con dos duelos dirigidos, el primero con resultado positivo (empate en Rancagua frente a Curicó Unido), Giovagnoli no tocó mucho el esquema que el equipo venía utilizando en el año, más cuando el tiempo entre uno y otro duelo no era mucho como para establecer la incorporación de su idea. Es por eso que, esta semana y la que viene, es un tiempo preciso para poder hacerlo. Eso sí, el 4-3-3 aún así le acomoda.
Además, el estratega tiene una buena noticia, puesto que Marcelo Larrondo (el primer refuerzo de este semestre) ya superó la etapa de adaptación y adecuación física, por tanto, está integrado de lleno al trabajo del grupo principal y perfectamente podría debutar en Viña de Mar. Además, se espera el arribo de Santiago Romero para las próximas horas, la segunda nueva incorporación.