Por: Fernando Ávila F.
Según el reporte estadístico de la brigada especializada, la cantidad de denuncias recibidas en la PDI por estafas y otras defraudaciones, a través de Internet, aumentaron significativamente durante la pandemia: un 29% al comparar el 2019 con el 2020, y un 89% si se consideran los cinco primeros meses de 2021 con igual período del año anterior.
Desde la PDI atribuyen esto a que, tras la entrada del COVID-19 en el escenario mundial, muchas de las actividades que se realizaban en forma presencial ahora se llevan a cabo de manera virtual: reuniones, compras y trámites generales son parte de la cotidianeidad. Ello aumenta el riesgo de ser víctima de algún delito asociado al uso de la tecnología.
Las cifras indican que, durante 2019, la PDI recibió 5.645 denuncias por el delito de “estafas y otras defraudaciones contra particulares” en todo el país. Un año más tarde, los casos aumentaron al totalizar 7.257.
Si solo se comparan los períodos comprendidos entre enero y mayo de cada año, se evidencia aún más el efecto del COVID-19 y las medidas de confinamiento para prevenir su expansión. En 2019, sin pandemia, hubo 2.298 casos. Al año siguiente, al inicio de la misma, hubo un alza de solo 187 casos, alcanzando un total de 2.485. Sin embargo, en los primeros cinco meses de 2021 las denuncias llegaron a 4.697, esto es, 2.212 más que el año anterior. En porcentaje, el crecimiento fue de un 89%.
Junto a lo anterior, los investigadores especializados en delitos cibernéticos, también han notado que entre las estafas “online”, la más frecuente es el “Sim Swapping”, conocido también como “secuestro de Whatsapp”.
¿Cómo opera este ilícito? Principalmente captan a sus víctimas entre personas que publican sus números personales en redes sociales con el fin de vender un producto. Con el objetivo de tomar el control de sus cuentas de Whatsapp contactan a estas personas simulando ser compradores. Es en este momento donde empieza a operar el engaño: Le dicen al vendedor que quieren ir a buscar el artículo, pero necesitan que les entreguen un “código de posicionamiento global” que le llegarán por mensaje de texto (SMS), que les permitiría llegar a la dirección correcta. Este código es, en realidad, el que genera la aplicación de mensajería instantánea cuando un usuario desea cambiar su cuenta a un nuevo teléfono.
Con esta fachada, luego de obtener el código, el delincuente hace traspaso de la cuenta de la víctima a su propio teléfono, haciéndose pasar por ella para solicitarle dinero a sus contactos, mediante un nuevo engaño.
Desde la brigada también precisan que, si logra percatarse a tiempo de esta estafa, la víctima puede revertir el “secuestro” ingresando a la página web de Whatsapp, donde, en caso de perder el acceso a la cuenta personal la empresa te envía, a las 12 horas, un código de reposición.
RECOMENDACIONES
En cuanto a la forma de evitar caer en todo tipo de estafas a través de Whatsapp desde la PDI recomiendan: Activar la verificación en dos pasos: en la aplicación Whatsapp localizar esta opción en “ajustes de cuenta”. Cuando está activo, este mecanismo de seguridad te pedirá una nueva contraseña (PIN), de seis dígitos, cada vez que se quiera registrar la cuenta en un nuevo dispositivo. Este paso se suma al código de verificación por SMS. También se debe proporcionar un correo electrónico que permite recuperar la cuenta en caso de olvidar la clave de seis dígitos.
No siga los enlaces: Si le llega un link no solicitado o de una fuente desconocida. No lo abra. Esto podría permitir a los delincuentes acceder a sus cuentas.
No comparta códigos: así como las claves de las tarjetas del comercio, es importante aprender a no entregar las claves. Además, conocer quién tiene acceso a su Smartphone, contribuye a disminuir los riesgos.
Avisar cuando se es víctima de la estafa: si ya se cayó en el engaño, avisar de esta situación a sus contactos a través de otra red social, para que no depositen en las cuentas de los estafadores. Siempre dudar ante cualquier información no solicitada. Este consejo es válido para cualquier red social o código que se reciba.
Las recomendaciones también se extienden hacia las compras electrónicas, donde la más básica recomendación para el usuario que incursiona en este tipo de compras cibernéticas, con un solo clic del mouse, son por ejemplo: No haga clic en los enlaces de los correos electrónicos, no abrir archivos adjuntos de minoristas, evitar las ventanas emergentes y los anuncios, tratar en lo posible de utilizar sólo una tarjeta de crédito, utilizar una red segura para comprar, sospechar de las ofertas gratuitas, cambiar las contraseñas evitando el 12345, fecha y palabras fáciles de adivinar.
El llamado es a monitorear periódicamente las cuentas personales, así como tener cuidado con las estafas donde supuestamente famosos regalan dinero, fraude que por lo general se hace vía Facebook.
La masividad de este tipo de delitos no está ausente en la región, y es así como por ejemplo provocó que la Policía de Investigaciones de Santa Cruz tomara acciones educativas conjuntas con el Municipio y la Fiscalía Local de la misma ciudad, e iniciaran una campaña comunicacional, que ayude a la comunidad a conocer la forma en que operan los delincuentes y cómo eludir sus engaños, evitando ser afectados sus recursos económicos.
“Hemos creado esta alianza para aportar a la ciudadanía conocimiento y entregar algunas herramientas que les permitan detectar cuándo están frente a una posible estafa. Que sepan cómo actuar y también difundan entres sus pares estas recomendaciones, para que no caigan en estos engaños que, finalmente, se traducen en perjuicios económicos” enfatizó el jefe de la Brigada de Investigación Criminal Santa Cruz, comisario, Renato Bustamante.