Por: Ricardo Obando.
Después de la dura derrota en el estadio La Portada, donde el segundo tiempo del equipo celeste dejó muchas, Miguel Ramírez salió a explicar su visión de este partido.
Las dudas se acrecientan, los puestos de descenso están a la vuelta la esquina y la caída tres en línea (cuarta en cinco partidos dirigidos por Cheito) está generando preocupación no solo en el plantel, sino que también en la dirigencia e hinchas.
RESPONSABILIDAD
En la conferencia de prensa en el mismo recinto deportivo, Ramírez, dijo que “la responsabilidad de estos tres puntos no ganados es totalmente mía”. ¿Por qué lo expuso? El primer tiempo, en desventaja por la cuenta mínima, tuvo a un equipo protagonista, que presionó alto, pero que no pudo anotar. Con variantes de esquema y de nombres, el cuadro rancagüino pasó a jugar con línea de tres defensores y sin extremos, hecho que hizo que La Serena se valiera de su juego de medio campo para abrochar el encuentro.
“Llamentablemente tuvimos la baja del Tucu Hernández, de Felipe Seymour, de Meneses y es así como tuvimos que ordenar el equipo para ser competitivos. Lo fuimos en parte del primer tiempo, y esos cinco minutos finales donde perdimos la salida por la banda y por el medio nos costaron caro”, añadió.
Es más, también repasó muy por encima el arbitraje de Fernando Véjar, por los penales sancionados y los otros no cobrados. “Hay determinaciones que condicionan el trabajo del equipo”, sostuvo.
Pero también, comentó que “nos han cobrado cuatro penales en estos cinco partidos y han habido yerros arbitrales que nos han costado goles. El resto es nuestro juego y en el juego el responsable soy yo. No soy de entregarme fácil y el trabajo nos tiene que obligar a sumar de a tres”.
Finalmente, comentó que “siento que en ningunos de estos cinco partidos que hemos jugado, salvo en el de Audax donde nuestro funcionamiento no fue el adecuado colectivamente, en el resto fuimos protagonistas, los que propusimos, pero los goles los hizo el equipo rival. Indudablemente que uno se cuestiona y toma determinaciones siempre pensando en la mejora del equipo. Los dirigentes ven lo que pasa con el entrenador, pero esa es una cuestión prematura creo yo, pero la propuesta está determinada para ganar”.
Cuatro derrotas y un triunfo es la campaña de Miguel Ramírez al mando de O’Higgins. Luego de la salida de Dalcio Giovagnoli se esperaba que el equipo levantara, pero no ha sido así. Hoy corre riesgo de quedar en puestos de descenso.