Todos los años, de una u otra forma hacemos diversos balances, estos años pasados han sido en su mayoría turbulentos, con grandes cambios y conflictos, por ello que la mayoría espera que la llegada del 2022 ponga, un poco de estabilidad.
Estamos viviendo una nueva era, donde el COVID nos mostró lo débil que estábamos como sociedad y lo necesario que era cambiar nuestra forma de vida. ¿Hemos aprendido de ello?, es lo que nos mostrara el paso del tiempo y este próximo año es el comienzo.
Otra área que ha cambiado es la sociedad, ya mucho más participativa y cooperativa, pasamos por varios procesos eleccionarios y con el fin de mejorar las condiciones de vida de todos, pero en especial de los que más necesitan. También esperamos que el esfuerzo que hizo cada en entregar un poco de nuestro estado de confort, para que a través de la nueva constitución podamos redirigir al país para poner en el centro la igualdad y sustentabilidad. Esperamos que este proceso llegue a un buen puerto y que se transforme en el mapa definitivo para que todos los chilenos trabajamos en conjunto, con un país descentralizado, donde la voz de los sectores rurales y alejados se escuchen de la misma forma que en las grandes ciudades.
Espéranos que el recambio generacional y de clico político pueda llevar a cabo los diversos procesos de instalación con éxito, ya que el país y en general sus habitantes no pueden seguir viviendo en los vaivenes de los turbulentos aires de la inestabilidad e incertidumbre.
Esperamos que los próximos años se transformen en épocas de cambios y consolidaciones que construyan a una mejor región para las próximas décadas, una donde los Gobernadores puedan gobernar según las opiniones y necesidades de sus propias regiones y no por conveniencias de lineamientos políticos de turno. Queremos que se mejoren las condiciones de los ciudadanos y no por querer convertirse en potencia agroalimentaria se sacrifiquen las vidas de los trabajadores – como lo ocurrido en el accidente de los temporeros en Peumo del miércoles pasado- o de los territorios producto de los monocultivos y mega productoras. Hoy el desafío es construir un muevo futuro sostenible, sustentable, asociativo, con mirada territorial respetuosa, y de crecimiento económico bajo la mirada patrimonial que permita reconstruir la región de O´Higgins para todos y todas.
Alejandra Sepúlveda
Jefe de Informaciones