Los habitantes de Chimbarongo y sus alrededores han construido una identidad propia moldeada por el vínculo con su entorno, generando un lugar único, muy difícil de encontrar en otra parte del mundo. La artesanía en mimbre otorga identidad a este territorio y puede ser caracterizada como una actividad que históricamente se desprende de la agricultura, y hoy día forma parte de la pluralidad de acciones que se realizan en el espacio rural y urbano del territorio de Chimbarongo, Convento Viejo, Codegua y Peor es Nada.
Podríamos señalar que en esta zona el mimbre tiene una vida social, ya que esta fibra natural es el eje central de un entramado de relaciones de diversos actores que encuentran un sustento económico y creativo en ella. Los actores de esta historia son agricultores, intermediarios, procesadores, artesanos y comerciantes:

El agricultor
El agricultor del mimbre necesita, principalmente acceso a la tierra y el agua para sus plantaciones. La alta demanda de agua de este cultivo requiere que el terreno donde se cultiva el mimbre tenga un nivel freático alto, en algunos sectores, el agricultor debe tener acceso al agua para que el riego, principalmente hecho por tendido, asegure la producción. Esto es especialmente importante en ciclos de sequía, que se han hecho más habituales en el país en los periodos recientes.
Los agricultores conocen el mimbre como cultivo desde muy jóvenes. Sin embargo, esta situación ha cambiado en los últimos años, ya que los propios padres estimulan a sus hijos para que se dediquen a otros trabajos, por lo sacrificado que consideran el trabajo agrícola.
La producción de mimbre es parte de la agricultura familiar campesina, pese a ello son pocas las mujeres que se dedican a su producción. Sin embargo, la mujer y la familia participan en periodos específicos del cultivo, especialmente en la post-cosecha.
El Procesador
El procesador es quien transforma el mimbre recién cosechado en un mimbre pelado de color café o negro. Para ello el procesador puede usar la materia prima que ellos mismos producen o comprar las varas de mimbre recién cosechadas. Requieren invertir en una infraestructura básica que les permita cocer las varas, que consta de tambores o piscinas metálicas, que se calientan, generalmente, con leña.
Los procesadores entrevistados no se dedican exclusivamente a procesar el mimbre. En un caso es su actividad principal, pero también se considera productor y artesano, en el otro caso, es una actividad secundaria dado que su actividad principal es el ser artesano. El entusiasmo de procesar el mimbre radica en una buena oportunidad de negocio y en la disminución de costos para producir artesanías con mayor valor artístico.
El/la artesano/a
Los artesanos, comenzaban a tejer el mimbre, trabajar en artesanía, generalmente junto a sus familias desde muy pequeños, entre los 8 y 10 años de edad. En la actualidad la baja rentabilidad y las nuevas expectativas que surgen con la educación superior han generado de una forma no intencional, que el recambio generacional de los artesanos sea poco o nulo.
Según indican los entrevistados, obtienen la materia prima individualmente y de diversas formas: i) algunos la compran a procesadores o intermediarios, ii) otros compran a agricultores y generalmente pagan el servicio de procesado. El valor comercial que los artesanos le dan a su trabajo depende principalmente de dos factores, la calidad de la materia prima y el tiempo y dedicación invertidos para confeccionar la pieza artesanal, siendo este último factor el más importante. Sin embargo, la valorización del trabajo a veces es eminentemente estético, y algunos artesanos dicen que algunas de sus piezas no son para la venta porque son el resultado de un trabajo afectivo que no tiene precio.
El Intermediario
El intermediario, que corresponde al nexo entre el agricultor y el artesano, es quien moviliza la materia prima, acercándola desde los campos en Convento Viejo, Codegua o Peor es Nada al artesano que se encuentra en la ciudad de Chimbarongo y que no puede comprar directamente al agricultor. Para realizar esta actividad, el intermediario debe contar con un vehículo para transportar los atados y de un lugar de acopio o bodega, donde pueda acumular el mimbre y mantenerlo seco. El negocio del intermediario es la reventa de mimbre pelado o mimbre blanco, lo que genera espacios de desconfianza entre agricultores y artesanos.
El/La comerciante
Los comerciantes, se distribuyen junto a la ruta 5. Los entrevistados indican que existen dos tipos de comerciantes: quienes son solo vendedores y otros que son o fueron artesanos. Los comerciantes-artesanos tienen empleados a jóvenes artesanos que son considerados en formación. En cambio, los comerciantes-vendedores tienen otra relación con los artesanos, comprando los objetos manufacturados que demanda el mercado para revenderlos en sus puestos.
¿Qué hace único al mimbre de Chimbarongo? Según indican las entrevistas realizadas en el contexto del proyecto FIC “Aumento de la competitividad del mimbre”, podemos decir que la respuesta está en la vida social del mimbre que está integrada por sus distintos actores: agricultores, procesadores, artesanos, intermediarios y comerciantes. Estos muestran diferencias porque expresan, defienden y manifiestan distintos intereses y formas de hacer las cosas, que reflejan un trabajo orientado más a lo individual que a lo colectivo, situación que no es distinta a lo observado en otros sectores del país.
Nota desarrollada en el contexto del proyecto FIC “Aumento de la competitividad del mimbre”, de la Universidad de Chile, financiado a través del Fondo de Innovación para la Competitividad del Gobierno Regional de O’Higgins y su Consejo Regional, enmarcado en la Estrategia Regional de Innovación. Basado en un estudio etnográfico desarrollado en 2020 y 2021 (contacto: psilva@uchile.cl).