Por: Tomás Arcas
Durante la última semana, vecinos del centro de Rancagua han denunciado el robo por las noches de decenas de tapas del alcantarillado público, cuyas rejas de fierro serían sustraídas para posteriormente ser comercializadas. Estos amplios agujeros son interpretados como un peligro para la ciudadanía, ya que se localizan mayoritariamente en veredas donde se han improvisado barreras y señalizaciones para evitar accidentes.
Las alcantarillas descubiertas se concentran principalmente en el sector de la población Rubio y la calle Ibieta. Este miércoles, el presidente de la junta de vecinos hizo un reclamo a la Municipalidad de Rancagua, la cual actuó con rapidez y gestionó la reposición de las tapas. A través de Twitter, el alcalde de Rancagua, Juan Ramón Godoy, le respondió a un ciudadano que denunció la situación que derivarían de inmediato el caso. Poco rato después, personal de Essbio trabajó durante la tarde en la restauración de las cubiertas del alcantarillado, adhiriéndolas con gruesas capas de cemento para prevenir nuevos hurtos.
