Por: Beatriz Valenzuela van Treek
Mag. Arquitecta – Presidenta del Comité Paisaje
Colegio de Arquitectos de Chile
Un gran hito ha marcado la idea de legislar aprobada en el Congreso acerca del Arbolado Urbano y la infraestructura verde.
El Comité del Paisaje del Colegio de Arquitectos de Chile colabora en el Congreso legislativo para que este Ley tan importante para las ciudades sea una realidad muy pronto. He entrevistado a una gran luchadora por años: la diseñadora Gabriela Germain.
Gabriela en el ámbito del activismo ha sido una de las líderes naturales que ha logrado instalar el tema del mal manejo del arbolado urbano y la necesidad de contar con sus beneficios, sobre todo considerando el contexto de cambio global y los problemas medioambientales de nuestro país, con el foco puesto en la obtención de una Ley de Arbolado Urbano que garantice buenas prácticas en el cuidado y gestión del arbolado urbano.
Gabriela, ¿Por qué legislar acerca del Arbolado Urbano y la infraestructura verde?
En la actualidad el manejo del arbolado depende de los Municipios, que no cuentan con criterios comunes ni correctos. El árbol urbano es visto como un BNUP y, por lo tanto, recibe un trato equivalente al que se le da a otros elementos de la infraestructura urbana, pasando por alto el hecho de que son seres vivos y que albergan vida. De hecho, estoy en contra del uso del concepto de “infraestructura verde”, tal como me opuse a su tiempo a la idea de vincular a los árboles con el “aseo y ornato”. (A mi juicio los árboles deberían vincularse a medioambiente y salud), porque la palabra infraestructura vuelve a “cosificar” a las plantas y árboles. Creo que eso no ayuda a promover el cambio cultural que urge instalar, eliminando la visión antropocéntrica, para reemplazarla por una más holística y respetuosa.
Una gran mayoría de ciudadanos y autoridades desconoce los beneficios de los árboles y la enorme cantidad de problemas que acarrea a los suelos, al aire, el clima y a las personas la falta de masa foliar en la ciudad.
Los árboles son vistos como una amenaza para la seguridad, como un problema para la limpieza y como un obstáculo para el crecimiento de las ciudades. El mejor ejemplo de esto es la pugna visible entre el crecimiento de los árboles y los cables para conducción eléctrica y de telecomunicaciones.
Falta una estructura administrativa adecuada y que cuente con los profesionales idóneos para atender y manejar los temas de arbolado público, considerando las variables técnicas, sociales y culturales, además de la salud física y socioemocional de las personas y, sobre todo los aspectos ecológicos y medioambientales en cada caso.
Faltan profesionales en el área específica del arbolado urbano, considerando específicamente que es distinta de la forestal y la agronómica.
La mayor parte de las Municipalidades han delegado el cuidado de los AU a empresas de paisajismo que no cuentan con los profesionales, equipamientos ni personal idóneos y no son reguladas ni son fiscalizadas adecuadamente.
Los ciudadanos han recibido años de una educación incorrecta, al punto en que han llegado a considerar correctas las podas mutilantes, que han llegado a ser llamadas “podas municipales”. Esto debería implicar la necesidad de reeducarlos acerca de los beneficios de contar con árboles en las ciudades.
¿En qué está la tramitación de la Ley?
Se encuentra en discusión en el Senado, en fase de aportes ciudadanos.
Estamos en el mes del Patrimonio: ¿qué arboledas urbanas históricas usted conoce?
Las de Providencia (Av. Ricardo Lyon y Av. Pedro de Valdivia), la Av. Libertad en Viña y Av. Urmeneta en Limache. Todas las mencionadas, con Plátanos Orientales que han sido muy cuestionados por problemas de alergia estacional, en una conversación, a mi juicio, muy incompleta, en que ha faltado hablar de otros factores que provocan alergias, como animales, pastos, gramíneas, flores y otros muchos árboles.
Tampoco se ha confrontado esa objeción con los problemas severos de la contaminación del aire en nuestras grandes ciudades. Y, finalmente, nadie ha descubierto todavía un árbol que lo reemplace y el hecho es que se siguen plantando en grandes avenidas.
¿La nueva ley protege también a estas arboledas urbanas históricas?
A mi juicio no.
Lamentablemente, a pesar de que la arboricultura es enfática en señalar que LOS ÁRBOLES URBANOS NO REQUIEREN PODA, la propuesta que está en discusión, incluye un largo listado de tipos de poda, no solo permitidas, sino, además, recomendadas. Y entrega las facultades para regular su manejo a unas Ordenanzas Municipales, que han demostrado históricamente ser demasiado débiles.
Gabriela Germain Fonck
Diseñadora Gráfica PUCV, Ilustradora y Fotógrafa.
En octubre de 2014 creó el Grupo de Facebook “En Defensa del Árbol Urbano en Chile”, que actualmente tiene 7.600 miembros y luego, la cuenta de Twitter @amoarbolurbano que hoy tiene 11.300 seguidores.
Ambas plataformas fueron creadas con el objetivo de hacer conciencia acerca de los beneficios que aportan los árboles urbanos, educar a los ciudadanos y autoridades respecto de la necesidad de mantenerlos adecuadamente, denunciar las podas, desmoches, mutilaciones y talas indiscriminadas e inducir cambios en su manejo y conservación.
Para lograrlo, he realizado registros fotográficos, aportado contenidos, difundido casos, denunciado malas prácticas, y promovido la discusión sobre aspectos técnicos, legales, medioambientales, de salud y seguridad, siempre con el foco en los árboles urbanos y sin desviar la atención hacia otros temas similares.
Al comienzo los seguidores en ambas plataformas tenían una actitud pasiva, pero con el tiempo han comenzado a exponer casos, hacer denuncias y preguntas, increpar a las autoridades y participar de manera cada vez más activa e informada.