Por: Gisella Abarca.
Del 4 al 6 de junio se llevó a cabo la Copa Mundial de Esculturas con Motosierras en la ciudad de Mulda en Alemania, específicamente en la localidad de Blockhausen certamen al que asistió el escultor Mauricio Pichuante.
En la oportunidad el artista de origen mapuche que vio en la motosierra una forma de hacer arte, se presentó con la obra “Sanidad a las Naciones” en que Chile era el árbol en que representó a una mujer Machi, teniendo en cuenta que las raíces son el pueblo Mapuche, comenta.
“Quise demostrar lo importante que son nuestras raíces, que sujetan y nutren al árbol para que crezca derecho hacia el cielo, teniendo en cuenta que un árbol sin raíces no da frutos. También las raíces sueltan al poyen (amor) humano que vuela hacia su hacedor a reencontrarse con sus ancestros, rostro guerrero, lágrimas en sus ojos, valiente pero a la vez sensible, abre sus alas para su último vuelo hacia su hogar en la eternidad”, expuso.
En este contexto el escultor agregó “Por último -pero no deja de ser importante- las raíces sueltan una paloma llevando una ramita de canelo demostrando que nuestro objetivo nunca fue la guerra; sino la paz y el amor a Negnchén (ser supremo) por regalarnos vivir en el paraíso. La familia es nuestro tesoro, eso es lo que defendemos y diez veces venceremos”.
Por esa obra y por su trayectoria como escultor con motosierra, Mauricio Pichuante recibió un destacado homenaje en el Paseo de la Fama de la localidad, espacio que reúne a los mejores escultores del mundo en la especialidad, cita que quedó coronada cuando el artista mirandino recibió la Estrella de la Fama, siendo el primer sudamericano que recibe la distinción, consagrándolo así como uno de los mejores escultores del mundo.