Más allá de las nuevas normas de producción limpia, el Gobierno del presidente Gabriel Boric, recalcó en su campaña que nuestro país caminaría a convertirse en uno ecológico. Más allá de los slogans los episodios de contaminación actuales en el sector industrial de la región de Valparaíso de Quinteros y Puchuncaví, pusieron entre la espada y la pared, o mejor dicho entre la producción y la comunidad, los ideales planteados en los tiempos de campaña.
Una decisión difícil la del cierre, que no fue tomada en los gobiernos anteriores pese a que se barajó en varias ocasiones y que viene en un complejo escenario político especialmente luego de estos 100 días de gobierno donde los balances no son muy positivos, hoy a todas las controversias se le suman las consecuencias del cierre de unas de las fundiciones más antiguas de la cuprífera nacional y que contempla el trabajo de unas 700 personas directamente.
Hoy, la decisión de cerrar Ventanas, y el anunciado paro de los trabajadores del Cobre de Codelco en general, es un alto costo en la búsqueda del país ecológico, tanto para el sector productivo local como para la aprobación del gobierno.
Uno de los puntos de la noticia fue la premura de la decisión, donde los trabajadores habían pedido mejorar las condiciones ambientales de la planta con una nueva inversión de millones de dólares y no cerrarla completamente, pero el ejecutivo cerro esa posibilidad al anunciar su cierre definitivo en 5 años, luego de conocer los malos balances sanitarios producidos por Ventanas pese a las inversiones previas de millones de dólares para mejorar los niveles de producción de contaminantes en la zona.
Decisión que no vino a la par con conversaciones previas con sindicatos, quienes al saber la noticia desconocían planes de cierre y detalles de la transición, lo que hizo que los trabajadores de Codelco se comenzaran a movilizar en todas las divisiones.
Hoy a las problemáticas relacionadas a la economía, a la salud y a la decisión de aceptar o no el cambio constitucional, se viene ahora un tsunami de cortes de carreteras, paros indefinidos y detenciones de faenas mineras, una muy mala combinación al actual estado de incertidumbre.
Todos queremos que nuestro país camine hacia un ambiente más limpio, sin zonas de sacrificio, con un gran potencial de Hidrogeno verde y crecer bajo el alero de la producción limpia a base de energías limpias, pero ¿Cuándo se debe dar el saltó a ello?, ¿será eso lo que ve el presidente con el cierre de la división fundidora donde el estado debe dar el ejemplo a las empresas privadas? La verdad que este es uno de los episodios que cambiará la idea de producción de todo el país y solo con el tiempo podremos saber cuál es el verdadero precio que deberá pagar el gobierno para lograr convertir al país a un tránsito de producción ecológica.
Alejandra Sepúlveda
Jefe de Informaciones