Por: Ximena Mella Urra.
La inversión extranjera directa (IED) ha sido uno de los principales factores de crecimiento económico, innovación y diversificación de las economías desarrolladas. Esta recoge a empresas o inversionistas extranjeros que se instalan en un país y que materializan su acción abordando distintos sectores productivos en los territorios, ya sea en nuevas fábricas, cultivos, proyectos de generación de energía o inversiones turísticas, etc., y que son visibles para las comunidades.
Si bien para el ciudadano a pie, se conoce muy poco sobre este tema, los beneficios que trae consigo la IED son trascendentales para nuestra región. Por ello, la Universidad de O’Higgins (UOH) está desarrollando el Proyecto Academia IED, iniciativa financiada a través del Fondo de Innovación para la Competitividad del Gobierno Regional de O’Higgins y su Consejo Regional, enmarcado en la Estrategia Regional de Innovación.
“Desde 2018, la nueva ley 20.848 faculta a las regiones de poder atraer directamente inversión extranjera. En este contexto, se diseña el proyecto, que busca entregar herramientas a la institucionalidad regional para hacer efectiva esta atracción y además la puedan mantener en el tiempo”, explicó Álvaro Astudillo, director de la Escuela de Ciencias Sociales de la UOH y director de este proyecto.
A su vez, el codirector de la iniciativa, el economista de esta institución, Pablo Peña, manifestó que la IED se caracteriza por instalarse físicamente en los territorios y a largo plazo. “Es decir, pueden abrir una fábrica o levantar instalaciones visibles. Es una relación entre el inversionista y el territorio donde llega para quedarse y por lo tanto genera impactos locales tales como la generación de empleo o de exportaciones”, agregó. Cuando este concepto se trabaja bien y de acuerdo a las potencialidades del territorio, es un pleno factor de desarrollo, acordaron ambos profesionales.
SOBRE EL PROYECTO
Este proyecto cuenta con tres ejes de trabajo durante dos años. “El primero de ellos apunta hacia la investigación sobre la IED que se ha instalado hasta ahora en la región y en qué comunas. Este estudio lo estamos terminando y nos hemos dado cuenta que las comunas de Rancagua y Mostazal son las que más han atraído inversión extranjera en los últimos 30 años. Mientras que en las provincias de Cardenal Caro y Colchagua existen inversiones de este tipo relacionadas a la agroindustria o viñas”, describió Pablo Peña. La idea, es estregarle al Gobierno Regional una agenda de los sectores productivos más prioritarios y factibles para la toda la región.
El segundo eje es la difusión, añadió Álvaro Astudillo. “Tenemos que generar conocimiento sobre la IED y que se vean sus beneficios. En el proyecto estamos muy interesados que la región completa participe y eso nos desafía a integrar a sus 33 comunas”. Es por lo anterior, que invitó a visitar el sitio web www.academiaied.cl donde se puede conocer los objetivos, actividades y cursos gratuitos que están ya realizando y que son abiertos a la comunidad y lo más importante, el proyecto ha establecido contacto con los equipos municipales de las 33 comunas de la región.
Finalmente, está la Academia IED, que le da el nombre a este proyecto. “La academia es un producto de formación de capacidades especializada para ejecutivos, profesionales, trabajadores o emprendedores de la región de O’Higgins. La primera fase se compone de 2 cursos breves online, abiertos y gratuitos, que hemos diseñado específicamente con contenidos relacionados con el ABC de la inversión extranjera directa”. Además, dichos cursos están certificados por la UOH.
Y en una segunda fase, la academia comenzará en el segundo semestre de este año, con un laboratorio o taller de proyectos en que las personas que hayan realizado estos cursos, presenten una idea de gestión en IED. “Deberán desarrollar una idea como inversionista, emprendedor o empresa que quiera traer inversionistas a los territorios y comunas que quieran atraer sectorialmente la inversión a su zona. Por eso trabajaremos con un grupo de profesionales nacionales e internacionales con talleres de coach y de liderazgo para que sean concretados finalmente”, expusieron sus representantes.
SUSTENTABILIDAD
Las inversiones traen buenas prácticas y nuevas tecnologías, promoviendo así la innovación dentro de los territorios a donde llegan estas inversiones directas, concluyen ambos representativos del proyecto Academia IED. “Un componente que favorece la inversión es el mejoramiento de los procesos y prácticas, que sean más limpios y más seguros, toda una gama de tecnologías que buscan esto, la sustentabilidad. Por lo tanto, está demostrado que los países que contribuyen más son los que disminuyen el impacto y los que mejoran las tecnologías y procesos productivos, lo que requiere innovación e inversión”.
Además, “los gobiernos regionales pueden y deben articular las políticas de atracción de IED con sus objetivos de desarrollo sustentable, de manera de promover la instalación en la región de empresas y proyectos mejores, más sustentables y que permitan afrontar los grandes desafíos en materia de descarbonización de nuestra matriz energética, de una agroindustria amigable con el medio ambiente o una serie de nuevos servicios que potencien un sello verde para nuestra economía regional” indicó Pablo Peña.