Por Gisella Abarca Aránguiz.
Falta de oportunidades, marginalización social y geográfica, carencias materiales, cesantía, es el común denominador en el Campamento Ribera del Rio Cachapoal, un difícil pasar que les ha tocado vivir a las más de 150 familias que viven en el sector Dintrans de Rancagua.
Por esta razón, para ayudar a quien lo necesita, del mismo modo que su padre el “Choro Pilo”, María Isabel Cifuentes Salinas, más conocida como la “Luca Pilo” hace una década llegó al sector y comenzó por darle vida al lugar activando la sede comunitaria.
Fue en ese lugar es donde en plena pandemia la coordinadora del campamento activó una olla común para apoyar a las familias que producto del Covid vieron allí un hogar donde vivir “antes eran 48 familias y con la pandemia se incrementaron a más de 150. Muchos no podían pagar arriendo y se vinieron para acá porque no les alcanzaba”, asegura.
Y es que Luca Pilo sabe del sacrificio que es vivir en un campamento, trabaja de carretonera, oficio que practica hace más de 20 años donde ha sido presidenta, secretaria, tesorera y ahora vocera de sus colegas. Además trabaja recolectando fierros, latas, chatarras y lo que llegue al campamento para vender a cambio de unos pesos, orgullosa nos cuenta que hace un par de meses tiene un trabajo estable.
LA NECESIDAD ABUNDA
A las 6 de la mañana comienza el día de la Luca Pilo para dar de comer a sus dos caballos, ya que 4 de ellos murieron de cólicos por no tener forraje que ofrecerles –comenta- mientras amarra a su yegua a los fierros que protegen su mediagua que le entregó Techo Chile al igual que a diez familias más “Esta casa me la regalaron hace como dos meses, hasta ahora no tengo luz, pero voy a colgarme como todo el campamento”, asegura María Isabel.
Y es que en el lugar la necesidad abunda y la precariedad crece cada día al igual que las familias que llegan al asentamiento “El campamento creció mucho, de 48 familias ahora hay 170, la pandemia trajo a muchas que necesitaban un lugar donde vivir y siguen llegando”. Cifuentes detalla que en el precario asentamiento la gran mayoría de quienes viven son compatriotas y solo dos extranjeros “a los migrantes no les gusta el río, porque es mucho el frío y no están acostumbrados”.
Y es que vivir a la Ribera del Rio es un desafío que hay que ganar día a día, sobre todo en invierno cuando golpean fuerte las bajas temperaturas “acá es muy helado, estamos al lado del río y las casas no están forradas, hay que echarse hartas frazadas encima para pasar las noches cuidando la leña o el carbón para cocinar y el agüita que sacamos de las pesebreras donde están los caballos, pero llega muy poca, falta abastecimiento de tarros”, declara la coordinadora del campamento dando cuenta que la falta de alimentos es el pan de cada día.
Cifuentes añade “Hay muchas personas mal económicamente. Aquí hay muchos que trabajan con pala y picota como areneros, se levantan a las 6 de la mañana a picar las piedras a separar arena más fina, harnearla y sacar material para que les paguen 6 lucas diarias. Acá hay mucha necesidad, siempre falta comida, ropa de todas las edades, pañales para adultos, falta de todo”, cuenta Luca Pilo. “Lo que llegue al río sirve, después se vende por material de reciclaje. Sería bueno si trajeran contenedores para botellas de plástico o de vidrios”, expone Cifuentes.
El lugar, por más de una década también acogió a Rosa Jara quien hace tres años vive en el canal de relave, pero cada mañana vuelve a trabajar de recolectora al campamento “es muy triste no tener casa. Vivo en una ruca donde no tengo luz, ni agua, me calefacciono con la leña que llega al río, con lo que sobra. No tengo baño, ni ducha, voy al baño en cualquier parte o pido prestado y almuerzo donde me pille el día. La Luca es como una hermana para mí, siempre me ha apoyado con lo poco que tiene”, dice.
No obstante, la Luca Pilo no se rinde y ya trabaja en un comité de vivienda del sector donde existen más de 150 personas inscritas –asegura- para ver cumplido su sueño de la casa propia “Me gusta ayudar, me gusta que la gente salga adelante, por eso hace cuatro meses inicié un comité, estamos juntando la platita para la Ejis. Así que ahora soy presidenta del Comité Fe y Esperanza”, comenta con orgullo.
Este campamento es una muestra de la realidad que se oculta en la región de O’Higgins en medio de flamantes edificios y elegantes condominios y que se repite en 15 comunas de nuestra zona donde existen 34 campamentos que albergan a casi mil familias, específicamente 889 hogares (ver recuadro).
Y es que Chile está viviendo una de las peores crisis de acceso a la vivienda de las últimas décadas. El impacto de la pandemia, la cesantía, el alza en los créditos hipotecarios, el precio de los materiales y por consiguiente de los arriendos, ha empujado a miles de familias a vivir de allegados, hacinados, en campamentos o en situación de calle. Realidad que representa una emergencia habitacional profunda en nuestro país y nuestra región que responden al mismo problema: la falta de acceso a una vivienda digna.
PLAN DE EMERGENCIA HABITACIONAL
Conscientes de la magnitud de la emergencia habitacional que estamos viviendo en el país, es que los primeros días de julio el Gobierno del Presidente Gabriel Boric presentó el Plan de Emergencia Habitacional con el desafío de construir 260 mil viviendas en los próximos cuatro años, generando 65 mil viviendas al año desde el sector público buscando abordar con sentido de urgencia la demanda habitacional que existe en Chile, que se estima se acerca a las 650 mil viviendas.
Entre sus principales objetivos está recuperar el rol central del Estado en la planificación y gestión habitacional, junto con entregar 260 mil viviendas durante el periodo de gobierno, lo que lograría cubrir al menos el 40% de la necesidad habitacional identificada.
Y es que la demanda habitacional proyectada en Chile a 2022, según estimaciones del Minvu a partir de datos del Censo 2017 y de familias viviendo en campamentos que llegan a cerca de 80 mil (81.643 familias), asciende 643.534 unidades. Con este Plan, que es parte de la nueva Ley de Integración Social y Urbana aprobada por el Congreso en marzo pasado, se logrará cubrir cerca de la mitad de la necesidad de viviendas que se concentran principalmente en las regiones Metropolitana -con cerca del 40% del déficit a nivel nacional-, seguida por Valparaíso y Biobío.
En este tema, el Seremi de Vivienda y Urbanismo, Óscar Muñoz, expuso que el Plan de Emergencia Habitacional “Es un tremendo desafío del Gobierno del Presidente Gabriel Boric que busca responder a la necesidad de viviendas dignas y adecuadas para las familias, acá no se trata de cifras más o menos, sino de entender que cada vez que entregamos una vivienda estamos construyendo hogares donde la calidad de vida de las personas se potencia. Por esa razón el Plan de Emergencia Habitacional busca transformarse en una política de Estado, que vaya más allá de un gobierno, y caminando de la mano con los pobladores, con los trabajadores, con el sector privado y el público de la mano para solucionar este gran desafío”.
Muñoz agregó que “Este Plan busca ser un camino para fortalecer distintos instrumentos como recuperar el rol del Estado en la planificación y gestión habitacional, entregar 260 mil viviendas durante el periodo de Gobierno, impulsar proyectos en todas las comunas del país y asegurar equipamiento social, robustecer el Banco de Suelo Público, diversificar las formas de acceso a la vivienda, como la autogestión, las cooperativas y el impulso al arriendo a precio justo, relaciones más directas con los ciudadanos y gobiernos locales y procesos de producción habitacional más eficientes, modernos y sostenibles”, indicó.
Asimismo, el Plan de Emergencia Habitacional define objetivos y metas anuales por región y comuna y para la región de O’Higgins, indicó el Seremi de Vivienda “El desafío regional es importante. Cuando hablamos de 260 mil viviendas en cuatro años, lo hacemos porque estamos saliendo de una pandemia que impactó negativamente la actividad de la construcción. Muchas empresas han quebrado, los precios del suelo y de los materiales de construcción también han aumentado (…) por lo que la meta que tenemos a nivel regional de 14.l667 viviendas para los cuatro años va a significar un gran logro. De esa meta ya tenemos en ejecución 9.248 viviendas por lo que debemos iniciar 5.419 viviendas para los cuatro años. Son casi 15 mil viviendas que no van a reducir el déficit; sin embargo, van a evitar que siga creciendo”.
Una ayuda que es bienvenida para nuestra región que cuenta con un déficit de viviendas de cerca de 17 mil familias, según cifras oficiales del Ministerio de Vivienda y Urbanismo “El Plan de Emergencia Habitacional determina que en la región el déficit de viviendas es de 16.836 (un 4% del total nacional), con una estimación de demanda de 25.938”, indicó la Directora Regional (S) Serviu, Daniela Soto.
CERCA DE MIL FAMILIAS VIVEN EN CAMPAMENTO EN LA REGION
En cuanto a las cerca de 80 mil familias que viven en situación de campamento en el país, en el Plan de Emergencia Habitacional se integran medidas dirigidas a ellas, a través del programa Construyendo Barrios con el que se intervendrán 300 campamentos o asentamientos irregulares urbanos que se encuentran en proceso de saneamiento; es decir, que serán regularizados y urbanizados, beneficiando en total a cerca de 25 mil familias en el territorio nacional.
En nuestra región, 889 familias viven esa realidad en 34 campamentos ubicados en 15 comunas -Rancagua, San Fernando, Chimbarongo, Machalí, Rengo, Placilla, Graneros, Mostazal, Quinta de Tilcoco, Peralillo, Navidad, San Vicente, Requínoa, Santa Cruz y Coinco-, con las que se pretende avanzar en soluciones de vivienda definitivas.
En esta línea el seremi de Vivienda Óscar Muñoz precisó que “en O’Higgins tenemos 34 campamentos. Es nuestra prioridad encontrar una solución habitacional para las casi mil familias que viven en alguno de estos asentamientos precarios. Para ello debemos trabajar en conjunto con otros ministerios, los alcaldes y la comunidad. El desafío es grande, pero el Plan de Emergencia Habitacional del Minvu, a través del programa Construyendo Barrios, intervendrá 300 campamentos en el país, que se encuentran en proceso de saneamiento; es decir, que serán regularizados y urbanizados, beneficiando en total a cerca de 25 mil familias”.
En esta línea, la Directora Regional (S) Serviu, Daniela Soto agregó que “Los 34 campamentos de la región que están en el catastro que manejamos como ministerio se verán beneficiados en sus distintas etapas de intervención. 13 de ellos, que son los nuevos involucrados, serán intervenidos en su fase de diagnóstico; 4 de ellos deben ser relocalizados durante este año y se le dará una solución a su necesidad habitacional a través de subsidios. El resto de los campamentos están dentro de las cuatro fases de intervención para poder relocalizar o erradicar a las familias. Estas fases son catastro, diagnóstico, ejecución del plan de intervención y cierre”.
Teniendo en cuenta el catastro 2021 que habla de 13 nuevos campamentos, la Directora Regional (S) Serviu declaró que el factor principal que hizo que se incrementaran los asentamientos precarios en la región “fue la crisis económica que se generó a partir de la pandemia, que provocó pérdidas de empleos y encarecimiento del costo de los arriendos y reducción significativa de la oferta de arriendo. Eso conllevó a que lamentablemente las familias se vieran obligadas a irse a campamentos”.
Para hacer frente a esta realidad, “el Minvu está trabajando en varias líneas porque el tema es multidimensional, por esa razón ya se expuso esta situación en el gabinete regional y como Serviu estamos desplegando contactos con otros ministerios para asegurar terrenos y soluciones, y estamos conversando con todos los actores involucrados como los municipios, el sector privado representado en la Cámara Chilena de la Construcción y fundaciones privadas” indicó Soto.
34 CAMPAMENTOS EN LA REGIÓN
6 Rancagua Santa Lucia II
Trapiche Molino Viejo II
Rivera del Rio II
Los Paltos
El Rabanal
Fundo Los Milagros
Las Pesebreras (Micro campamento)
4 San Fernando: Polonia Carretera.
La Unión hace la fuerza.
Santa Elena.
Tinguiririca
4 Chimbarongo: Matadero
Las Ranas
Las Canteras I
Las Canteras II
3 Machalí: El Guindal – Los Peumos
12 de Febrero
Los Peumos II
3 Rengo: Tricolor
Orompello
Rio Claro
3 Placilla La Tuna
Cerrillos
Estación Placilla
2 Graneros El Arrozal
Recinto Estación
2 Mostazal: Rio Peuco
Rio Peuco Carretera
1 Quinta de Tilcoco: El Manzano, Los Boldos.
1 Peralillo: Los Encinos
1 Navidad: Rapel
1 San Vicente Cerro San Luis
1 Requínoa Cerro Verde
1 Santa Cruz Barriales
1 Coinco Tres Puentes