Una sentida necesidad de las mujeres coyinas era contar con un ecógrafo en la posta rural de la localidad, ya que la falta de este equipamiento las obligaba a viajar al centro urbano de Machalí o incluso a Rancagua para realizar sus controles prenatales o ginecológicos.
Hoy, esa situación cambió, gracias al convenio de salud comprometido por la División El Teniente y que ha permitido, desde hace dos años con distintos proyectos, robustecer la atención médica de los habitantes de Coya.
En ese contexto, esta semana se concretó la entrega oficial del primer ecógrafo de la posta —tras un período de marcha blanca en el centro de salud— reflejo del trabajo mancomunado entre El Teniente, la Municipalidad de Machalí y la agrupación Coya Renace, quienes levantaron la solicitud a la cuprífera y autoridades.
Prevención y control
Cecilia Rodríguez, enfermera y encargada (s) de la Posta Rural de Coya, destacó como un hito “muy relevante para la población” la llegada del ecógrafo.
“Hay usuarios que no tienen los recursos económicos para trasladarse a Machalí o Rancagua para realizarse las ecografías prenatales, entonces este equipo acerca este examen a las usuarias, de manera gratuita y con una profesional capacitada”, sostiene.
“Muchas mamás no se hacían todas sus ecografías, pero ahora no hay excusa para que tengan sus controles al día y que podamos derivar a tiempo si detectamos una anomalía”, agregó.
Violeta Ibáñez, matrona capacitada para el uso del ecógrafo, explica que este equipo permitirá realizar ecografías tanto obstétricas como ginecológicas.
“Lo ocuparemos para realizar pesquisas de embarazo hasta las 12 semanas y podemos monitorear también pacientes con más semanas de ser necesario. En cuanto a la parte ginecológica, el ecógrafo viene a cumplir una labor fundamental en la prevención del cáncer endometrial y en pacientes que presenten sangrados irregulares que no sabemos de dónde vienen, acá lo visualizamos inmediatamente”, detalla.
Durante el periodo de marcha blanca, que comenzó en septiembre, Estefanía González estaba embarazada y fue la primera usuaria del servicio, por lo que pudo ver cómo su hijo Adrián, nacido hace un mes, crecía antes del parto.
“Fue una experiencia nueva no tener que viajar a Rancagua o Machalí para los controles. Me parece una muy buena oportunidad y es emocionante haberlo vivido y que ahora lo pueda aprovechar la comunidad”, reflexionó.
El convenio
En el marco del convenio de salud con la localidad de Coya, la División aportó en la compra de una ambulancia exclusiva, la adquisición del ecógrafo y la extensión de horas médicas en la posta local, para mejorar la calidad de vida de coyinas y coyinos.
En particular, la compra del ecógrafo surgió a raíz de la solicitud de la agrupación Coya Renace a la División El Teniente y del compromiso de la Municipalidad de Machalí para contar con personal para el manejo del equipo.
“Estamos muy emocionadas, porque este es un gran paso para la comunidad y muchas mujeres no tienen los recursos para estar viajando continuamente a Machalí o Rancagua”, dijo la integrante de la agrupación, Cecilia Rebolledo.
Cristian Sanhueza, director de Desarrollo Comunitario de El Teniente, destacó que como división “tenemos el propósito de generar valor social. Si se engrandece la operación, tenemos que crecer juntos con la comunidad al mismo nivel. Cuando las cosas se hacen en conjunto y la comunidad está atenta y activa, nuestro rol es recoger lo que nos dice”.
Por otra parte, el administrador municipal de Machalí, Julio Peña, manifestó que están “muy contentos por la inauguración de este ecógrafo. Ha sido un trabajo mancomunado entre las distintas organizaciones y luego de varias reuniones nos da felicidad ver incluso a un bebé que tuvo sus primeras imágenes en este equipo. Esperamos que sea el primero de muchos y muchas”.
