
La pequeña Antonia Rocío Jorquera Morales de tan solo 5 años era la alegría de vivir de sus padres. Desde mucho antes que naciera la esperaban con ansias. Pero todo se volvió un infierno cuando de un segundo a otro, el pasado sábado 17 de diciembre, la niña perdió la vida en un trágico accidente vehicular acontecido en el kilómetro 76 de la Ruta Travesía, a la altura de la empresa Indura, comuna de Graneros. En el lugar también falleció el conductor de otro de los vehículos involucrados.
Ahora su familia inició una frenética búsqueda para dar con el paradero de quienes, según su relato, serían los verdaderos responsables de esta tragedia. Conversamos con su padre, Carlos Jorquera, quien iba conduciendo su camioneta ese día con dirección al sur. “Antes del auto que quedó delante de mío vi que paró un auto blanco que posteriormente se dio a la fuga, a recoger una carga que se le había caído, unos potes de algodón de azúcar”, indicó. Ahora pide a la Fiscalía y el Ministerio Público que se investigue a fondo qué es lo que pasó con ellos y cuál es la responsabilidad que les toca. Añadió que el fiscal emitió una orden a la SIAT de Carabineros para que se pericien e incauten 5 cámaras de vigilancia del sector necesarias para poder ubicar este furgón blanco al que se hace referencia.
Carlos quien trabaja como Supervisor de Abastecimiento en la empresa ME Elecmetal Planta Rancagua, agregó que sus abogados que este jueves tomaron la causa llevarán adelante la querella criminal contra quienes resulten responsables por cuasidelito de homicidio. El abogado Marcelo Tejos es el encargado ahora de asesorar y representar a la familia. “Este siniestro tiene 4 involucrados, aunque en el parte se consignan solo 3. Uno de ellos, un Suzuki Baleno, se detuvo a raíz que unas personas se encontraban en la carretera recogiendo una carga que habían perdido desde el cuarto vehículo, aparentemente sería un furgón blanco Mercedes Benz Sprinter con letras rojas”, relató. “En segundo lugar se detuvo el vehículo de don Carlos, una camioneta marca Mazda. Fueron ellos quienes recibieron el fuerte impacto de una camioneta roja pick up marca SsangYong”, cuyo conductor falleció en el lugar al igual que la pequeña Antonia.
Estos involucrados que escaparon del lugar, “generaron una condición de inseguridad en la conducción. La ley de Tránsito trata de reducir el riesgo por las conductas de los conductores. Un vehículo que derrama su caga y genera una condición de peligro también incurren una infracción de tránsito que con la investigación después se puede deducir si es o no consecuencia de la tragedia. Pero existe la responsabilidad que claramente debe ser atribuida”, explicó el profesional jurídico agregando que la está la expectativa intacta de que se dará con el paradero de este móvil, que por ley presume iba conduciendo su propietario.
“Las acciones iniciales son claves, Hoy nuestra posición es ventajosa respecto a otros casos que he tenido porque las personas no buscan asesoría legal de inmediato. En esta oportunidad don Carlos y su familia ha contado con una importante red de soporte legal porque sus empleadores se han dedicado a brindarles este tipo de apoyo. Se sabe que las primeras indagatorias en los primeros días luego del accidente, son primordiales”, concluyó Tejos. Ahora la querella mantendrá la vigencia al proceso investigativo que está llevando la Fiscalía con respecto de este accidente.
Finalmente, se sabe que Carlos Jorquera resultó ileso pero su esposa Claudia Morales, madre de Antonia, y trabajadora en la empresa Link en Rancagua, resultó gravemente herida por lo que ahora ha debido pasar por diversos procedimientos quirúrgicos para disminuir los efectos del accidente.