Con la intención de relevar valores como la empatía, solidaridad, altruismo y gratitud, el Hospital Regional del Libertador Bernardo O’Higgins (HRLBO) desarrolló una serie de iniciativas, partiendo este lunes con la visita del coro de la Iglesia de Jesucristo de los Últimos Días, grupo que dio el vamos oficial a las instancias interpretando villancicos tradicionales. “Abrimos estas actividades pre- navideñas con el coro de misioneros mormones en el hall de nuestro hospital, la idea es que entre OIRS y nuestros voluntarios acompañemos a usuarios, pacientes adultos y pediátricos toda esta semana con distintos gestos, en el entendido de que se trata de fechas sensibles en que muchas veces se necesita compañía y contención”, expresó Alejandra Valencia, jefa del Departamento de Participación y Satisfacción Usuaria de la institución.
Con lo anterior, la Fundación Ronald McDonald fue la encargada de continuar las iniciativas que se distribuyeron toda la semana, entregando regalos a pacientes hospitalizados en la UPC pediátrica, con una puesta en escena circense, “sabemos lo complejo que es estar hospitalizado en estas fechas y es por ello que decidimos sumar este carácter circense, así brindar más alegría en vísperas de navidad”, señaló Lorena Escobar Coordinadora de la Sala familiar de la Fundación en el Hospital Regional.
Seguido, un grupo de voluntarios católicos junto al capellán, del HRLBO, padre Claudio Godoy, llegaron hasta el Servicio de Neonatología para entregar presentes, útiles de primera necesidad y medallitas de “San Benito” para los más pequeños. “Estamos haciendo esta entrega de regalos para los pequeñitos de neonatología y quienes estén en los pasillos de la atención ambulatoria. Queremos ser un aporte en la antesala navideña”, subrayó el capellán católico. Luego fue el turno del coro de la Iglesia Pentecostal, que, apostados en el acceso principal, cautivaron la atención de los usuarios que se desplazaban a esa hora. “Somos más de cuatro mil funcionarios, por lo que la participación de este coro y el anterior, marcan nuestra diversidad religiosa que es importante recalcar”, destacó Silvia Miranda, encargada de la Unidad de Acompañamiento Espiritual de OIRS, a cargo de las presentaciones corales.
El viejito pascuero por su parte, se desplazó a Urgencia Pediátrica con el equipo Medicina Física, sorprendiendo a niños y niñas ingresados a la unidad. “Esta es una fecha muy importante para los niños, por eso quisimos hacer este recorrido en particular”, relevó Paulina Riquelme, psicóloga, parte del equipo de Medicina Física, mientras que la enfermera supervisora pediátrica del HRLBO, Marcela Torrens, de Urgencia Infantil añadió que “nos contenta la presencia del viejito pascuero, hace que estos pequeños olviden por un momento la situación que los ha traído, ayudando a que se sientan mejor”.
El concurso de dibujo “yo y la navidad”, de la sala de estimulación de Pediatría, convocó menores hospitalizados a participar, sublimando el espíritu navideño, “se trata de niños que en muchos casos llevan largo tiempo acá, que necesitan distraerse, entretenerse, el objetivo fue que nos contasen cómo veían la navidad en el contexto hospitalario”, indicó María Cristina Riveros, educadora de párvulos de la Sala de Estimulación Pediátrica del establecimiento.
La destreza de bomberos vino a coronar las jornadas en el HRLBO, con voluntarios de la Cuarta y Quinta Compañía, que junto a su grupo Green, descendieron disfrazados ad hoc desde el séptimo piso del HRLBO, generando momentos de emoción entre quienes vieron el desplante. “Quisimos hacer este saludo simbólico de navidad para saludar a los niños y funcionarios de una manera diferente”, comentó el voluntario Sebastián Ruz de la Cuarta Compañía de Bomberos de Rancagua.
Finalmente, se destaca y agradece el espíritu altruista demostrado también por una familia anónima rancagüina que participó recorriendo los pasillos del consultorio de Pediatría, con globos y pinta caritas entregando presentes a niños y familiares a la espera de atención.
