En dependencias del Teatro Regional de Rancagua, las alumnas de octavo año del Colegio Marcela Paz celebraron su licenciatura junto a sus amigos, apoderados y familiares. Las estudiantes que en su mayoría cursaron 10 años en el establecimiento recibieron sus medallas y diplomas.
Al comienzo de la ceremonia se les agradeció a los apoderados por elegir este recinto para formar a sus niñas y confiar esta labor a un establecimiento público, donde la mayoría de las licenciadas partieron su educación en el Marcela Paz hasta su licenciatura de octavo.
Este colegio de enseñanza y formación integral exclusiva para mujeres nace en Rancagua en 1886, con el objetivo de generar para ellas oportunidades de desarrollo cognitivo, afectivo y social de cara al futuro.
La misión de este recinto educativo se centra en potenciar las habilidades y capacidades de sus estudiantes de manera que puedan liderar cambios sociales en armonía con los desafíos de la sociedad actual. Su visión es constituirse “en un referente en la formación integral de calidad para las futuras líderes transformacionales”.
Su historia partió hace 136 años, en un edificio ubicado en la intersección de las calles O’Carrol y Alcázar, para luego continuar su desarrollo en nuevas y modernas instalaciones en Almarza 1029.
Con una primera matrícula de 63 alumnas, sus inicios, modestos y sencillos, fueron dando paso a una institución fuerte que comenzó a destacarse en el ámbito educativo y que hoy cuenta con una cantidad de 927 estudiantes que van desde el nivel de Pre Básica hasta 8vo Básico.
En el año 1986 recibe el nombre de Colegio Marcela Paz en homenaje a la ilustre escritora chilena y Premio Nacional de Literatura doña Ester Hunneus Claro, cuyo seudónimo ha nominado al establecimiento hasta hoy.
Actualmente el colegio mantiene la tradición de sus inicios, con una matrícula que se ha incrementado con el paso del tiempo, sobrepasando las 1.000 alumnas, posee excelentes espacios y recursos didácticos y tecnológicos para desarrollar el proceso educativo. Existe, además, un ambiente de sana convivencia y mediación escolar, con altas expectativas y profesionalismo de sus directivos, docentes y asistentes de la educación.