John Novoa
Gerente Divisional de Hyundai Camiones y Buses.
Durante 2022 se registró el mayor número de inscripciones de vehículos propulsados por tecnologías de cero y bajas emisiones: un total de 6.904 unidades en todo el país (según cifras de ANAC). Este incremento del 106,2% respecto del año anterior obedece a una mayor confianza de los usuarios en la electricidad para propulsar sus vehículos. Pero esto es solo en los segmentos de pasajeros y comerciales livianos, ya que, si revisamos las cifras de vehículos comerciales, solo se anotaron 65 camiones inscritos. Si bien este segmento también registró un importante aumento respecto de 2021 (un 209,5% más), lo cierto es que en el transporte de bienes y mercaderías falta mucho por avanzar.
La oferta de camiones eléctricos abre las puertas de la electromovilidad a los transportistas, reduciendo las emisiones en los traslados interregionales y las entregas de última milla, pero no es suficiente para generar un cambio real en el sistema.
Las PYMES deben jugar un rol primordial en la transición a la electromovilidad en vehículos de mayor escala, ya que son ellas las llamadas a visibilizar la tecnología entre sus clientes de manera cercana y amigable, con unidades de uso diario que representan el cambio más cercano y tangible para las personas. Opciones como los créditos con tasas preferenciales, plazos de hasta 8 años y hasta un 100% de financiamiento que el Banco Estado ofrece a quienes quieran comprar un camión eléctrico de Hyundai, son herramientas no solo de crecimiento para las PYMES, también son una oportunidad de transformación y de decirle al mundo que creemos en que esta tecnología puede ser para todos, de manera equitativa y sin restricciones.
Reducir las emisiones es una tarea imperativa, y los camiones eléctricos son los llamados a iniciar el cambio hacia una visión más estratégica de la electromovilidad, ofreciendo no solo el producto, también soluciones que se traduzcan en reducciones del costo de implementación y en incrementar la disponibilidad de las zonas de carga.
Avanzar en la masificación de la electromovilidad no sólo tiene el componente de innovación y tecnología, su arista más importante es el cuidado del medioambiente, tarea que nos toca a todos por igual y cuya urgencia se hace cada día más patente. Junto con ello es importante que los Estados avancen en reducir los impuestos al lujo asociados a la electromovilidad, para dar mayor acceso a los vehículos no contaminantes. Adicionalmente, es importante generar incentivos en la reducción del valor de los permisos de circulación. Todas estas medidas en su conjunto apoyarán el acceso de las pymes en la electrificación del parque y así la comunidad en su conjunto estará trabajando de manera colaborativa en el cuidado del medio ambiente.
