Fotos Nico Carrasco.
El expresidente de la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC), Juan Sutil, es candidato a consejero constitucional por la región de O’Higgins.
El nuevo rostro en la política que se la jugará por quedarse con un cupo en la Convención Constituyente y redactar la nueva carta magna que regirá los destinos del país indicó que se inclinó a participar del proceso porque “es demasiado relevante cumplir con el compromiso de aquellos que estuvimos por el Rechazo en el período anterior al 4 de septiembre donde gana la opción de Rechazo a una Constitución que estaba mal planteada, donde no compartí ni la forma en que se hizo, ni el fondo de lo que proponía y la oportunidad que tenemos hoy es a contribuir a tener una Constitución que resuelva los problemas de la gente” dijo el líder empresarial.
En entrevista con El Rancagüino, el empresario agrícola expuso que “Tenemos que hacer una Constitución que permita re dignificar la política para que haya buenos acuerdos, para que Chile tenga un texto que una a todos los chilenos y que las diferencias políticas se zanjen a través de elecciones y de los programas de gobierno que pueda haber a futuro”.
La apuesta electoral de Renovación Nacional en la región de O’Higgins agregó que “La gente dijo claramente en Chile que no quería refundaciones, sino cambios con gradualidad y esos cambios es importantes hacerlos. Hay que hacer reforma en pensiones, tributarias, en salud, pero hay que hacerlo bien y con la gradualidad que corresponde. Nadie cambia radicalmente de un día para otro”.
De este modo, el líder empresarial dejó en claro que se la jugará por un texto constitucional sólido, robusto, que sea unitario, democrático y representativo, y que asegure los derechos fundamentales de los chilenos. En la siguiente entrevista, les dejamos más detalles del candidato a Consejero Constitucional por la región de O’Higgins, Juan Sutil.
¿Por qué decide ser candidato por la región?
R.- Por O’Higgins, porque es mi región de adopción. Yo no nací acá, pero he desarrollado toda mi vida -empresarial y laboral- en la región. COAGRA parte en la Cooperativa Agrícola de Graneros, hoy es una compañía que está a lo largo de todo Chile, la Agrícola Sutil lo mismo, la Viña Sutil que exporta a todo el mundo también; por lo tanto, me siento de la región. Hemos contribuido a la región en generación de empresas, empleos de calidad, desarrollo, contribución al país, contribución al desarrollo profesional de esta zona.
¿De dónde nacen las ganas de inclinarse a ser Constituyente?
R.- La razón por la cual he querido participar de este proceso y de aspirar a representar a O’Higgins, es porque me conecta y me une muchos principios que la región tiene, sus valores, sus tradiciones, el sentido común que tiene la ciudadanía, el mundo minero y todas esas sensibilidades las podría representar.
Pienso también que es demasiado relevante cumplir con el compromiso de aquellos que estuvimos por el Rechazo en el período anterior al 4 de septiembre donde gana la opción de Rechazo a una Constitución que estaba mal planteada, donde no compartí ni la forma en que se hizo, ni el fondo de lo que proponía y la oportunidad que tenemos hoy es a contribuir a tener una Constitución que resuelva los problemas de la gente, que sea una Constitución muy robusta, para poder tener seguridad, oportunidades, mejores empleos, desarrollo, derechos sociales para lo que se necesita financiamiento.
Una Constitución que nos represente a todos, pero que sea sólida, que permita estabilidad, seguridad y oportunidades de trabajo para todos, porque una Constitución que no genera esas condiciones, tampoco va a generar las condiciones que necesitamos todos para que el país siga avanzando.
¿Usted plantea una Constitución minimalista; ¿es decir, que entregue más principios y que la ley resuelva los detalles, o maximalista?
R.- Tiene que ser una constitución más bien minimalista, no híper minimalista; que permita que todos salgamos adelante y para eso, necesitamos tener un texto que lo queramos y respetemos todos.
Para eso, debe haber bases muy sólidas, como son los principios de la libertad, entre otras cosas, libertad de expresión, libertad para emprender, libertad para hacer empresa, libertad de culto, libertad de enseñanza y, por lo tanto, una Constitución que con bases y principios sólido, permita que las personas podamos salir adelante en base a nuestro esfuerzo y trabajo. Una Constitución que tiene que proteger en base a entregarnos mecanismos que el futuro de las leyes nos tiene que dar seguridad, estabilidad, progreso, que sigamos siendo un país mejor y no quedarnos en recetas que pueden hacernos retroceder.
Chile ha avanzado mucho, en los últimos 40 años, el país tenía más del 70% de pobreza, hoy tiene menos del 10% y todavía tenemos mucho que luchar para que eso no lo tengamos que seguir viviendo; y por otro lado, tenemos una clase media que necesita más oportunidades -la gente de trabajo, de esfuerzo que aspiro representar- saben que al haber mejores reglas, más disciplina, más estabilidad, y mejores leyes, hay más emprendimiento, más oportunidades de empleos de calidad y más desarrollo.
¿Cómo ve el rol de las regiones en esta Constitución?, ¿Será una Constitución más regionalista?
R.- Creo que hay que aprender del proceso pasado que fracasó por plantear cosas que eran muy extremas, incluyendo el desmembramiento del país. Los chilenos queremos una Constitución más bien unitaria. Debemos tener un Estado unitario sin duda, pero también debemos tener una regionalización muy robusta, y eso es a través de un buen Gobierno Regional con un manejo de un presupuesto mayor y no que los Consejeros Regionales o el Gobernador de la región tener que andar pasando el platillo ministerio por ministerio para conseguir los recursos. Creo que, si esos recursos con buenas reglas y normas que permitan la protección de los recursos, mientras más autonomía tenga las regiones en su manejo, es lo que necesariamente necesitan todas las regiones del país.
¿Entonces serían mayores presupuestos y mayores atribuciones, pero más que al Gobernador hacia los Consejeros Regionales?
R.- Al Gobierno Regional, que es el Gobernador junto con sus Consejeros y que eso permita que haya una mejor interacción con el gobierno central, pero lo más importante es que puedan tener la capacidad de manejar la billetera, porque el presupuesto de la región bien administrado puede rendir muchísimo más que administrarlo a través del Gobierno Central.
¿Existe la opción de generar impuestos regionales?
R.- Pienso que no. De hecho ya existe algunas atribuciones para impuesto regionales partiendo por patentes municipales, y esos tienen diferentes tarifajes que los alcaldes pueden optar por una tarifa u otra; pero pensar en impuestos regionales, la experiencia que hay en otros países que son federados en ese sentido, es muy mala, porque deteriora las finanzas generales del país y genera que se produzca una inequidad respecto si un Gobierno Regional es muy agresivo en términos tributarios y descompensa el propio desarrollo de las regiones en su conjunto. Creo que es mucho más posible que un Gobierno Regional tenga la capacidad de administrar un potente presupuesto, bien hecho para su gente, que aplicar impuesto regional.
¿Una o dos cámaras en el parlamento?, ¿mantener el Senado y la Cámara de Diputados?
R.- Ha sido muy importante la Cámara Diputados como también la Cámara del Senado, porque la primera representa regiones más chicas, y la segunda representa a las regiones y no los distritos. Es importante que haya una voz regional y junto con eso, en el Senado se logra perfeccionar las leyes y el equilibrio tan importante para la estabilidad del país. En el gobierno anterior todas las leyes que se están planteando hoy para seguridad fueron rechazadas por las autoridades actuales de gobierno y hoy esas leyes este propio gobierno las está empezando a implementar, por ejemplo, la ley de robo de madera, ahora se está discutiendo la ley de usurpación.
Poder tener diferenciación de los poderes del Estado como un Poder Judicial que podemos mejorar, lo importante es que sea independiente. La única manera de cuidar la democracia y evitar populismo son los diferentes poderes del Estado y las instituciones.
¿Sistema presidencial como el que tenemos o presidencialismo atenuado? ¿Parlamentarismo?
R.- Eso es materia de debate en la Convención y de hecho va haber una propuesta. El deber de quienes seamos elegidos de discutirlo al respecto. En lo personal, pienso que Chile es más bien presidencialista, yo soy presidencialista y creo que el principal problema que existe hoy día dice relación con la regulación de la ley electoral que hoy favorece la disgregación. Hoy tenemos más de 20 partidos políticos representados en el Congreso; las democracias que son más robustas, los países más sólidos y más desarrollados, tienden a generar las condiciones para permitir que haya bloques políticos más robustos y menos partidos políticos.
Tenemos que hacer una Constitución que permita re dignificar la política para que haya buenos acuerdos, para que Chile tenga un texto que una a todos los chilenos y que las diferencias políticas se zanjen a través de elecciones y de los programas de gobierno que pueda haber a futuro. La gente dijo claramente en Chile que no quería refundaciones, sino cambios con gradualidad y esos cambios es importantes hacerlos. Hay que hacer reforma en pensiones, tributarias, en salud, pero hay que hacerlo bien y con la gradualidad que corresponde. Nadie cambia radicalmente de un día para otro.
¿Hay algo que rescatar del proceso anterior?
R.- Hay que rescatar la experiencia de un proceso muy mal hecho, que oyó, pero no escuchó a las personas. No escucharon el mensaje de las personas, hubo muchas iniciativas populares que ni siquiera fueron consideradas, entonces creo que este proceso tiene que ser mucho más inclusivo, tiene que considerar a todos los chilenos, tiene que haber más respeto.
Pero para esa escucha mucho tiempo no hay…
Habrá que tener el tiempo y la sociedad civil tendrá que organizarse en cómo se representa para poder tener todas esas posibilidades de ser escuchada como corresponde.