Pasó más de una década para que los fieles del sector de Los Romos, de Pichidegua, pudieran celebrar nuevamente la Eucaristía en su capilla, dedicada a San José y que el pasado 19 de marzo fue consagrada, por el obispo de Rancagua, monseñor Guillermo Vera Soto, junto al párroco de la parroquia Nuestra Señora del Rosario, padre Miguel Ángel Riveros.Llena de emoción y alegría, la comunidad parroquial participó de este rito. Es que fueron años de trabajo para alcanzar su reconstrucción, tras ser destruida por completo por el terremoto 27F de 2010.
La coordinadora de la capilla, Cecilia Pérez Ulloa, contó que el 2010, al ver la capilla destruida, hubo mucha pena y desconcierto, no obstante, no se quedaron paralizados, sino que rápidamente crearon un comité de reconstrucción, presidido por Segundo Parraguez y Cecilia Pérez en la secretaría, que comenzó a trabajar.
Mientras, las Eucaristías eran celebradas en la casa de la familia Muñoz Araya y en casa de Cecilia, se realizaba la catequesis entre otras acciones pastorales, y también eventos para reunir recursos.
Entre 2011 y 2012, se tuvo que limpiar el terreno y sacar todos los escombros, para comenzar a trabajar. Esta capilla se fue construyendo paso a paso, en la medida que la comunidad parroquial generaba recursos desarrollando diversas acciones, como la venta de completos, participación en la Feria de las Pulgas, bailes para el 18 de septiembre, bingos, bonos de cooperación, entre otras. También enviaron cartas a varias instituciones y particulares que fueron realizando donaciones anónimas: “Hay gente bastante cooperadora, que donaba ladrillos, cemento u otros elementos de construcción”, aseveró Cecilia, agradecida por todos esos gestos que hoy les permiten volver a reunirse como familia de Dios.
Emocionada Cecilia Pérez Ulloa señaló que “nos costó mucho tener nuevamente nuestra capilla, trabajamos harto, primero con el padre Omar Canales y luego el padre Miguel Ángel Riveros. Sentimos mucha emoción al poder participar en la consagración con el obispo de Rancagua, porque nos sentimos parte de esto que es muy grande para nosotros”, aseguró.
LA CONSAGRACIÓN
Al comenzar la consagración, el obispo de Rancagua, monseñor Guillermo Vera Soto, invitó a la comunidad a ingresar a la capilla, tras recibir de manos de la coordinadora de la capilla, Cecilia Pérez Ulloa las llaves, para posteriormente entregárselas al párroco de Pichidegua, padre Miguel Ángel Riveros, quien abrió las puertas del templo.
En la ceremonia también participaron autoridades locales, encabezadas por el alcalde de Pichidegua, Marcos Fuentes Ulloa, y concejales.
Ya en el interior de la capilla, el pastor diocesano procedió a desarrollar los diferentes ritos de consagración, que permite que quede habilitada para celebrar la Eucaristía.
En la oportunidad, y después de la misa y consagración, el presidente del comité de reconstrucción, Segundo Parraguez; y el padre Miguel Ángel Riveros, párroco de Pichidegua, se dirigieron a los presentes, agradeciendo la constante colaboración para alcanzar este momento tan hermoso, que es ver reconstruida la capilla San José de Los Romos.