Con pala, carretilla, guantes y muchas ganas, así amigos, familiares, trabajadores y conocidos, la mañana de este lunes laboraban en la remoción de escombros del Restaurante “El Reencuentro” que la madrugada del domingo desató una alarma de incendio en el centro de Rancagua.
El intenso fuego producido en el criollo restaurante ubicado en calle Cuevas entre Astorga y Bueras alcanzó a dos locales por lo que tuvieron que concurrir cinco Compañías de Bomberos con más de 80 voluntarios y el apoyo de voluntarios de Machalí con un carro portaescala.
Pasada la medianoche, Luis Orellana, propietario del Restaurante “El Reencuentro”, supo que en la céntrica cuadra de la ciudad un local se estaba quemando: “Estaba en mi casa durmiendo. Me avisaron a las 12:15 de la noche un vecino que me dijo ‘se está quemando al lado de tu negocio’. Venía con un poco de conformismo y con la esperanza que no fuera mi local, me venía vistiendo en el auto mientras mi hijo conducía; pero al llegar a la esquina de Cuevas, me di cuenta que era mi local que estaba destruido”, relata aún con tristeza Orellana.
16 años de historia, esfuerzo y sacrificio, se vieron opacados esa madrugada con el fuego que consumió casi la totalidad de sus instalaciones, afectando parcialmente al local contiguo. “Una pésima noticia, años de esfuerzo en que nos habíamos consolidado como negocio. En el rubro llevo muchos más años, pero en esta ubicación de Cuevas 16 años y verlo perdido todo, todo el esfuerzo familiar, da mucha pena”, comenta Orellana.
TRABAJAN PARA PONERSE DE PIE
Pero esta adversidad no opaca a la familia de “El Reencuentro” que ya trabaja para ponerse de pie, comenta su dueño “No es la primera vez que empezamos desde cero y no va a ser esta la excepción”.
Y es que una de las motivaciones de este empresario para volver a comenzar viene del apoyo que ha sentido desde esa fatal noche “Acá hay amigos, familiares, los trabajadores, todos se han portado una maravilla, el apoyo de la gente, de los clientes ha sido grande”.
Quien agrega “Estoy tramitando el arriendo en la Plaza de los Enamorados y esperamos tener los permisos en diez días para poder empezar a funcionar. Detrás de mí, aparte de mi familia, hay 18 más que dependen de este trabajo. Hay que comenzar a echarlo a andar rápido”, asegura Orellana.
El propietario del Restaurante El Reencuentro detalló que mientras reconstruyen las instalaciones de su negocio esperan trabajar en un local cercano “Mientras se reconstruye acá, vamos a estar ubicados en la Plaza de los Enamorados, a 50 pasos de acá. Ahí tienen que llegar quienes quieran disfrutar de la comida casera de El Reencuentro, nuestros típicos platos como pecado frito, cazuela de vacuno, chunchules, lomo a lo pobre”.
La invitación a seguir apoyando a este altruista emprendedor rancagüino que perdió más del 90% de su local está hecha, pues quien tendió la mano quien necesitaban ayuda en pandemia, ahora necesita de su apoyo.
Es que especialmente durante la pandemia en este local se ha ayudado a las personas que necesitan, entregando un plato de comida.