En un mundo cada vez más consciente de la importancia de preservar el medio ambiente y en un esfuerzo por reducir la huella de carbono y promover prácticas ambientalmente responsables, empresas locales de reciclaje están llevando a cabo una importante tarea en la región.
En este escenario, BDC se destaca por su compromiso con el manejo adecuado de residuos. Esta empresa familiar, con raíces en Reciclajes del Sur desde 1996, ha evolucionado para convertirse en un referente en la recuperación de materiales reciclables y en la disposición final de residuos industriales no peligrosos en la Región de O’Higgins.
Cristian Sáenz Solar, Gerente General de BDC, está liderando esta iniciativa. Este emprendedor que creció inmerso en la cultura del reciclaje, recuerda sus raíces en la recolección de fierros y chatarras en las calles. Hoy, su empresa maneja cerca de tres mil toneladas mensuales de residuos, transformándolos en valiosa materia prima para el mercado nacional.
“Partimos con el tema de los fierros, recolectábamos en las calles y hoy se nos dio la oportunidad de tener una empresa donde podemos mover grandes cantidades”, compartió Cristian Sáenz.
Y es que la empresa se ha comprometido con principios fundamentales donde destacan la prevención de la contaminación y la mejora continua en la gestión de residuos que comprende desde la clasificación y envasado de residuos hasta su recolección interna y externa, asegurando una disposición final adecuada.
En esta línea, BDC se involucra en la recuperación de materiales como acero, aluminio y plástico, integrándolos nuevamente en la cadena de uso. Este proceso contribuye significativamente a la reducción de la contaminación y al fomento de la economía circular.

EL PROCESO
El proceso de transformación de estos residuos en materiales nuevos es minucioso y eficiente. BDC cuenta con dos empresas, incluyendo Transporte Sáenz, que se encarga de recolectar residuos de grandes empresas en la región como Agrosuper, Unifruti y Extrabrut, entre otras. Los residuos luego son segregados por tipo y sometidos a procesos de enfardado, trituración y peletización. Además, la empresa se dedica a la segregación de residuos ferrosos y no ferrosos para su tratamiento adecuado.
Cuando llega un camión cargado de cartones, en la planta de Requínoa se comprimen los residuos en fardos para minimizar los envíos y la contaminación con hidrocarburos. Con el plástico, el proceso es igualmente detallado: “El plástico tiene más aristas, más tipos de polímero. Ellos son expertos y dividen los materiales para segregarlos de forma correcta. Tenemos polipropileno (PP), PET, eso es lo fuerte”, explicó Sáenz Solar.
Una vez segregados, los materiales son enfardados, triturados y peletizados. Estos productos son entregados a diversas empresas que los utilizan para fabricar una variedad de productos, desde bolsas hasta palets y cajas para la fruta.
“Tenemos empresas que les entregamos estos fardos y trabajamos con ellos hace bastantes años. Por ejemplo, la bolsa Superior que está en el mercado, la mayoría de nuestros residuos de plásticos flexibles llegan a esta planta que se llama Superior y que hoy hace la bolsa que se maneja en Chile”, detalló el Gerente General de BDC.

LA LEY REP POTENCIÓ SU TRABAJO
Con su dedicación a la economía circular y su compromiso con la Ley de Responsabilidad Extendida del Productor (Ley REP) la empresa transforma residuos en recursos valiosos. Y es que esta nueva ley -que comenzó a regir en enero de este año- es un pilar fundamental en el manejo de residuos en Chile y esta empresa se suma a la legislación cumpliendo con las responsabilidades de los productores en la gestión de los residuos asociados a sus productos. Esto se traduce en un manejo responsable de los materiales posconsumo, contribuyendo así al cuidado del entorno y al desarrollo sostenible del país.
“La ley REP nos vino a ayudar y potenciar, porque antiguamente éramos nosotros quienes teníamos que estar buscando empresas que quisieran reciclar. Actualmente las empresas nos llaman para fomentar el reciclaje y poderlos ayudar con sus residuos”, dijo su fundadora, Daniela Ibarra.
“Para nosotros fue super importante la llegada de esta ley, porque llevamos en el reciclaje años, mi marido hace 20 años y nosotros como empresa en la sexta región llevamos 12 años y la llegada de esta ley nos hizo potenciar mucho más nuestro trabajo y ayudar mucho más al medioambiente”.
Actualmente, BDC y sus empresas asociadas están transformando cerca de tres mil toneladas mensuales de plástico y cartón en productos valiosos. Este esfuerzo no solo reduce la cantidad de residuos en vertederos, sino que también contribuye significativamente a la economía circular y al cuidado del medio ambiente.
Si quiere saber más de esta empresa que cuida el medioambiente visite Instagram @bdctusociosustentables y cocerás más acerca de labores de esta empresa de reciclaje.
