En estos días se trabaja para ampliar las vías del sector de Baquedano, un espacio vial que ya está colapsado y que los vecinos piden hace años. Pero para que esta nueva infraestructura pueda llevarse a cabo algunos puntos tradicionales deben desaparecer, según los diseños gubernamentales. Uno de ellos es la Gruta de Lourdes.
La gruta es parte de la parroquia Cristo Rey en Rancagua, existe desde la década de 1920 cuya construcción emula al santuario original emplazado en la localidad homónima en Francia. Un lugar tradicional espacio para las oraciones, penitencias y recogimiento que pese a los años y los miles de placas y agradecimientos de los fieles las autoridades no ven como sagrado o que tenga reconocimientos patrimoniales que sean dignos de mantener.
¿Qué es un lugar patrimonial? ¿estos nacen o se hacen?, La verdad que la gruta cumple con muchas características que pueden convertirla en un sitio patrimonial, primero su historia, segundo su arquitectura, tercero la relación que tiene con los habitantes de la región de O´Higgins. Es una muy mala idea borrar toda esta historia y cambiarla por una vía – que dicho de paso no es necesaria en ese punto de las vías ya que existe la doble vías actualmente- hoy se pretende destruir plegarias, compromisos, reencuentros, vivencias y peticiones, pero sobre todo un pedazo gigante de la vida de los miles que hemos peregrinado al lugar con el fin de cumplir por ayudarnos en una prueba, en la sanación de un enfermo, entre otro.
Queremos que el lugar tiene actitudes suficientes para ser mantenido y convertirse en un monumento público así perpetuar la memoria del lugar y sus características.
Recordemos que el patrimonio no nace patrimonial, sino que se hace y es tareas de todos protegerlo y mantenerlo de aquellos que simplemente quieren una modernidad sin historia.
Así las cosas, cabe preguntarse entonces si la directora(s) del Serviu O’Higgins fuera directora en Italia, España, o Perú ¿no existiría ningún lugar patrimonial o ningún vestigio histórico? Ellos hablan de progreso y de sustentabilidad, pero la verdad que estos términos incluyen la protección de la historia y la cultura. ¿En la región y en Rancagua existirá alguna autoridad con pantalones para proteger nuestra historia? No todo es en blanco y negro y se pueden encontrar soluciones ¿o el progreso es solo aumentar las vías de concreto?
Por otra parte, está la palabra empeñada por diversas autoridades hace pocos meses, compromiso adquirido en torno a respetar la gruta. Promesa hoy desconocida, difícil pedirle a la ciudadanía que confié en los políticos o incluso en el Estado, si a la primera de cambio tan fácilmente las promesas firmadas frente a la comunidad son tan prontamente olvidadas.
Alejandra Sepúlveda
Jefe de Informaciones.
Luis Fernando González
Sub Director.